Repuesto de cuatro delicadas operaciones, el comediante graba ya la cuarta temporada de la serie
TEXTO: Alejandro Salazar Hernández FOTOS: Jose Luis Ramos Desde la semana pasada se graba en Televisa San Ángel y locaciones de la Ciudad de México la cuarta temporada de la serie producida por Guillermo del Bosque. Dos momentos aportaron la emotividad en el primer día de labores dentro del Foro 11: el festejo del cumpleaños de Carmelita Salinas, y el regreso de Adrián Uribe a los foros ya repuesto de cuatro operaciones (las tres primeras en 15 días), que lo pusieron al borde de la muerte. El comediante recibió calurosa bienvenida de sus compañeros, encabezados por el productor y Ariel Miramontes, también protagonista de la serie que narra las aventuras de El Vítor y Albertano que, muy a su pesar, buscan empleos que les permitan sobrevivir. Esta vez, la trama dará un vuelco de 180 grados, pues ambos se ganan un premio de la Lotería “y ya no serán los mismos; serán nacos, pero con varo”, dice Ariel, quien estará acompañado de Manuel “Flaco” Ibáñez y ahora también Vanessa Bauche, además de invitados especiales, entre quienes destaca Lupillo Rivera. Aún no determinan la fecha de salida al aire.
“DEBE HABLARSE DE UN ANTES Y UN DESPUÉS EN MI VIDA” El pasado 5 de octubre, Adrián Uribe y Consuelo Duval emprendieron en Phoenix, Arizona, su gira con Enparejados, show de comedia que presentarán por tres meses en Estados Unidos. La experiencia le inyectó nuevos bríos al comediante, quien el pasado 8 de septiembre cumplió 46 años, aunque hace unos días aseguró que de ahora en adelante cada 10 de mayo también festejará su renacimiento tras la citada crisis de salud provocada por los estragos de una malla que le colocaron hace 15 años en una hernia umbilical. “NUNCA ME HABÍA SENTIDO TAN VULNERABLE” ¿Qué sensación te produce regresar a la chamba después de todo lo que has pasado? Mucha felicidad. Agradezco a todos, principalmente al público, por estar al pendiente siempre, y más por sus buenas vibras. Después de una experiencia tan cañona como la que viví, definitivamente debe hablarse de un antes y un después en la vida de Adrián Uribe. Me siento como en un reality show; cuando estaba en Big Brother y Bailando por un sueño la gente me decía: “¡Voté por ti!”. Aquí es: “¡Recé por ti!”, “Yo prendí una vela por tu salud”. Ese cariño no se paga con nada.