TEXTO: GRISEL VACA • FOTOGRAFÍAS: JAVIER ARELLANO, EDSON VÁZQUEZ, RUBÉN ESPINOSA, WEB
En enero de 2017, Archie Balardi le entregó el anillo de compromiso a su entonces novia, Violeta Isfel, ¡sin imaginarse que este sería un gran error! Tres meses después, la actriz finalizó la relación. Sin embargo, la pareja sorprendió a propios y extraños al anunciar a un mes del truene que retomarían su noviazgo y asistirían a terapia de pareja para solucionar sus problemas, pero lamentablemente la relación no prosperó y ahora sí terminaron definitivamente. Platicamos con el comediante, quien confesó que una de las razones de su rompimiento pudo ser, paradójicamente, el haberle pedido matrimonio a Violeta.
“CAMBIÓ NUESTRA MANERA DE PENSAR”
Archie, estamos sorprendidos con la noticia de que terminaste definitivamente tu relación con Violeta Isfel...
¡Sí, caray! Desde marzo ya no estamos juntos. Lo que pasa es que decidimos mantenerlo a discreción porque la primera vez hubo muchos chismes y rumores, así que ahora fuimos más cautelosos, aunque ella ya dijo que está disfrutando de su soltería.
¿Cuál fue el motivo real de esta separación? Cada quien fue tomando un camino diferente. Ya ven que el año pasado, por ahí de abril, terminamos, luego nos dimos una segunda oportunidad y tomamos terapia de pareja, pero ya no se volvieron a dar las cosas, la relación no dio más. Eso no significa que no la quiera o que no la ame, simplemente ya no se dio.
¿Qué consideras que les faltó? No sé. Empezamos muy bien, todo marchaba perfecto, pero creo que el problema fue que le di el anillo de compromiso, que a lo mejor Violeta no quería hacer una vida formal conmigo, tiene miedos, no lo sé. Se lo atribuyo a la “maldición del anillo” que le di a finales de enero de 2017.
¿Qué pasó con el anillo, te lo regresó? Sí, yo lo tengo. La primera vez que tronamos no me lo regresó, pero esta vez sí. Intentamos venderlo juntos, pero a la mera hora no se dio, así que aquí lo traigo.
“CHANCLA QUE TIRO, NO LA VUELVO A LEVANTAR”
Entonces, ¿en esta ocasión es definitivo?
Sí, por mi parte se acabó. La última vez que regresamos le comenté que, si no funcionaba, terminaríamos para siempre, ya que no estaba de acuerdo con ese tipo de relaciones en las que truenan y regresan. Creo que eso habla de personas inestables y que no saben lo que quieren, así que sí, se terminó y sin posibilidad de reconciliación. Como dice mi abuelita: “chancla que tiro, no la vuelvo a levantar” (risas).
¿Te ha buscado?
No, ella está en sus rollos y tampoco creo que esté considerando la posibilidad de poder regresar. Pero bueno, uno nunca sabe. Violeta cumple 33 años y yo cumplí 38, entonces no sabemos si en unos años, cuando tenga 45, se vuelva a dar, porque fue un amor muy bonito, una gran pareja. Violeta es una mujer muy disciplinada, apasionada, trabajadora. En realidad nos fue muy bien en esta relación, pero creo que cambió nuestra manera de pensar.
¿Los hijos influyeron?
Para nada; al contrario, sigo viendo a su hijo Omar. El día que mis hijas me celebraron mi cumpleaños estuvo conmigo, fui por él al Lunario porque Viole se estaba presentando ahí. También nos mandamos mensajes por celular; sé que andaba en Pachuca jugando futbol. De repente me dice “papá” o “jefe”. La neta, le agradezco a Violeta que me siga permitiendo tener contacto con él.
¿Terminaron por mutuo acuerdo? Sí; digamos que fue un sano distanciamiento. De hecho, no quise saber de ella por un buen tiempo, hasta hace poco que nos vimos y hablamos. Tenemos unas fechas vendidas con la obra El briago de Oz, en la que participamos los dos, pero en diciembre la sustituirá Ivonne Montero.
¿Cómo te sientes con todo esto? Primero estuve tranquilo y luego le di vuelo a la hilacha. Por ahí andamos tratando de ver quién sigue.
¿A poco ya estás saliendo con alguien? Sí, pero todo tranquilo. Es una mujer que no tiene nada que ver con el medio, y espero que Violeta también encuentre a alguien que le dé la felicidad que busca, porque es una gran mujer. La pasé increíble a su lado y le agradezco a la vida haberla conocido.