CHICO CHE CHICO se prepara para poner en la cima la Chicochemanía
TEXTO: LILIANA LEJARAZU • FOTOGRAFÍAS: OCTAVIO LAZCANO
Quién no recuerda los famosos temas de Chico Che como ¡Uy, qué miedo!, Los nenes con los nenes y ¿Dónde te agarró el temblor? Pues ahora pueden escucharse recargados y con nuevas fusiones gracias a Roberto Carlos Hernández Rodríguez, el segundo hijo del ídolo tabasqueño. Chico Che Chico, como se hace llamar el también músico de profesión, acaba de lanzar su álbum debut CD+DVD Quén pompó reloaded como tributo a su padre, quien el próximo año cumplirá 30 años de fallecido. Ahora promociona el tercer sencillo de este material, Chido chido, y nos reveló que él lo es para los deportes extremos, por lo que lo llevamos a escalar. Y aunque nunca lo había hecho, llegó hasta la cima, tal como quiere estar con su movimiento que ha denominado la Chicochemanía.
“SIEMPRE ME HE DEDICADO A LA MÚSICA, PERO EN PROYECTOS MÁS CULTURALES”
Cuéntanos sobre tu experiencia en la escalada...
Es la primera vez que lo hago, pero quedé muy contento porque llegué hasta arriba y lo hice con diferentes grados de dificultad.
Así como tu nuevo sencillo Chido chido, ya descubrimos que eres chido chido para los deportes extremos...
Sí, me gustan mucho. En el sureste hacemos esquí acuático, an- damos a caballo, en moto... otro tipo de actividades. Esto nunca lo había hecho, pero me gustó.
Antes de este tributo a tu padre, ¿qué hacías? Siempre me he dedicado a la música, pero en proyectos más culturales. Ejercí como maestro de música en Tabasco, pero ahora estamos de lleno en este proyecto y viajando por todos lados.
¿En qué momento se te ocurrió hacer este movimiento de la Chicochemanía?
Es un proyecto que ya teníamos, era un sueño y ahora es una realidad porque el disco ya está; yo tenía ganas de hacerle un homenaje a mi padre por esa gran carrera de más de 20 años y 44 discos, así que estamos felices porque el disco ya está fuera desde el 28 de septiembre.
¿Hace cuánto tiempo empezaste a trabajar para que esto fuera una realidad? Dos años.
Son grandes éxitos los que vienen en el disco, pero como dices, tu papá hizo 44.
¿Tienes plan de sacar más volúmenes con canciones de él?
Me lo tomo paso a paso; sí me gustaría sacar más volúmenes porque se quedaron inquietudes como la música instrumental, que también siempre estaba incluida en los materiales que grabó mi padre, y otras canciones, que por ser más de 400 las que grabó, no se pudieron incluir en este material.
Traes varias colaboraciones en el disco, platícanos cómo se dieron... Agradezco mucho a todos los que aceptaron colaborar en este material porque eso nos ayuda a acercar la música de mi padre a las nuevas generaciones, y hay colaboraciones con Juan Solo; Los Claxons, que me encanta porque ellos son de Monterrey y nosotros del sureste, entonces es una fusión padre; también están Andy & Lucas que son unos españoles, y Hugo Fernández, que es una de las voces, junto a la de mi padre, más representativas de la cumbia.
“MIS HERMANOS Y YO ÉRAMOS NIÑOS CUANDO MI PAPÁ FALLECIÓ” ¿Qué recuerdos tienes de tu padre?
Mis hermanos y yo éramos niños cuando mi papá falleció, estábamos en la primaria, yo tendría unos nueve años, y era un padre divertido, alegre; normalmente lo acompañábamos en cosas de trabajo, porque como estaba siempre en actividades de promoción, entonces las oportunidades de convivir con él eran las que tenían que ver con la música.
Además de la música, ¿tu papá para qué era chido chido? Le encantaba el motocross y lo practicaba, llegó a tener un club de motos, acumuló 14. A mí también me gusta mucho, pero ya no lo hago tanto después de que mi hermano mayor tuvo un accidente en una y se voló un dedo del pie.
¿Tus hermanos a qué se dedican ahora? A la música no, aunque estamos todos involucrados en este proyecto. Harley es psicólogo y Francisco estudió Turismo.
¿De qué manera colaboraron en el proyecto tus hermanos? Las gestiones las empezamos con Harley, con él empecé el proyecto y a buscar las canciones. Ahora está sumada toda la familia, mi madre estuvo sacando todos los recuerdos, parte de la ropa de mi papá y recordando anécdotas.
Vemos que traes el sello distintivo de tu papá, el overol y los lentes, que no te los quitaste ni para escalar... Sí, es como un distintivo; no son como los de él, porque esos eran para ver y los míos sólo son oscuros, buscando no ser igual. Es un homenaje nada más, porque por ejemplo, él nunca usó mezclilla, sus overoles eran de gabardina, otro tipo de materiales.
¿Te mandas hacer tus overoles?
Algunos sí, otros los vamos encontrando por donde andamos. Ya tengo varios y me gusta mucho el negro, entonces, los que tengo son con combinación en negro.
¿Y los lentes no piensas quitártelos en ningún momento? Me los puedo quitar, son sólo un accesorio, parte del look, no significan nada más, no es porque esté bizco (risas).
¿Le temes a las comparaciones con tu papá? No me enfoco en eso, hicimos este proyecto con el corazón y con ganas de compartirlo con la gente. Yo sé que existen las comparaciones, pero no me enfoco en eso; sé que mucha gente no conoce la carrera de mi papá, sólo las canciones que sonaban más, pero si te adentras en su carrera te haces fan.
¿Planeas una carrera independiente a los éxitos de tu papá? Sí, de hecho comparto con mi papá la afinidad por el rock, así que sí, quiero también hacer música.
