Figura indiscutible del espectáculo y mujer apasionada de su familia, CHRISTIAN BACH murió tras penosa enfermedad
Texto: Alejandro Salazar Hernández Fotos: Archivo Editorial Televisa
Christian Bach fue partidaria de guardar sus asuntos pesonales y familiares en intimidad absoluta. Humberto Zurita, su esposo, y sus hijos Sebastián y Emiliano determinaron hacer cumplir su voluntad hasta en el día de su muerte. La actriz falleció el pasado 26 de febrero presuntamente en Los Ángeles, California, y fue hasta los primeros minutos del 1 de marzo que su familia difundió la noticia a través de un comunicado. Un paro respiratorio segó su vida tras un padecimiento degenerativo que la obligó a retirarse del medio artístico en 2015, y que desde entonces desató una oleada de rumores respecto a su estado físico que sus allegados mantuvieron en total hermetismo. El próximo 9 de mayo cumpliría 60 años. Se graduó como abogada en su natal Buenos Aires, Argentina, luego de estudiar teatro, danza y participar en la televisión local durante su adolescencia. Al actuar en la telenovela La mujer frente al amor (1978) llamó la atención del productor chileno Valentín Pimstein, quien se encargó de traerla un año más tarde a México y comenzar a forjar una exitosa carrera como actriz y productora, aparte de consolidar con Humberto Zurita su propia dinastía artística que se encargó de despedirla amorosamente. TVyNovelas honra en este espacio a Christian Bach, figura indiscutible del espectáculo en México y, ante todo, una mujer apasionada de su familia. No se dieron detalles de su funeral, pero trascendió que su cuerpo fue incinerado y la urna con sus cenizas reposará en una iglesia de Torreón, Coahuila. Su recuerdo queda en el corazón de millones de personas que admiramos su talento y belleza. Descanse en paz. DUELO ÍNTIMO. Humberto Zurita ya se reincorporó a sus actividades en la Ciudad de México y reiteró su petición de dejarlo a él y a sus hijos vivir su pena en paz. ¡ADIÓS AMOR! Su esposo por 33 años, el actor Humberto Zurita, le dedicó este mensaje en su cuenta de Instagram. En la foto, la belleza de Christian Bach en todo su esplendor cuando grabó la telenovela Atrapada (1991). EMOTIVA DESPEDIDA. Con este comunicado, la familia Zurita-Bach notificó el deceso de Christian: “Una gran madre y una esposa que llenó la vida de su familia de amor, valentía, coraje y grandes deseos de vivir”. HIJA ÚNICA. Adela Christian Bach Bottino nació en Buenos Aires, Argentina, el 9 de mayo de 1959. En sus venas corría sangre alemana, italiana y rusa, esta última por parte de su abuela materna. VENA ARTÍSTICA. Su abuela y su madre fueron bailarinas; la primera del Ballet Bolshoi de Moscú, la segunda bailó en La Scala de Milán. Aquí con su padre, Roberto Bach Meizegeier. INFANCIA DORADA. Al no tener hermanos creció rodeada de muchas mascotas y practicando deportes y vida al aire libre. Fue aplicada en la escuela, pero su conducta era terrible, confesó.
DEPORTISTA EJEMPLAR. Jugó voleibol para la selección juvenil de Argentina; era hiperactiva. “Mi problema no fue qué iba a hacer, sino qué iba a dejar de hacer en la vida”, se jactaba. ¡ASÍ LA DESCUBRIÓ VALENTÍN PIMSTEIN! “Me recomendó con él Abel Santacruz, autor de las telenovelas Mundo de juguete y Chispita. Yo trabajaba en La mujer frente al amor, que tuvo muchísimo éxito en Argentina, y eso me permitió conocer Televisa. En 1978 me ofrecieron la telenovela Viviana, pero no pude hacerla porque aún tenía contrato por año y medio en Argentina. Valentín me insistía en que me oscureciera el cabello. Después me ofrecieron Muñeca rota, basada en la vida de Marilyn Monroe. Le dije ‘No’. ‘Si me conocieran en México sería fantástico, pero si voy a ser otra güera más imitando a Marilyn, ¡qué flojera!’. Al año siguiente había firmado para filmar tres películas de Los Ángeles de Charlie, una obra de teatro en Mar del Plata... y me dice Pimstein: ‘Estamos produciendo novelas de 20 capítulos, ¿por qué no vienes?’. Le respondí: ‘¡Maravilloso!’. Vine entonces a actuar en una historia llamada Verónica, con Julissa, Ricardo Blume y Aldo Monti. Yo era María Teresa, una niña de escuela mala, mala...”. Lo demás es historia. COMPAÑERAS DE VIDA. En 1979 actuó al lado de Edith González en Los ricos también lloran y se hicieron cómplices. Su amistad se fracturó por años, debido a que a Christian se olvidó de invitarla a su boda en 1986. MAESTRA DE LUJO. Su debut como antagonista fue en Soledad (1980), al lado de Libertad Lamarque. “Me asustaron porque decían que ella era terrible. Pero todo lo que sé de actuación, me lo enseñó ella”.
UN CLÁSICO. Con Frank Moro y Miguel Palmer estelarizó Bodas de odio (1983), exitosa historia de época cuya interpretación le significó el Premio TVyNovelas a Mejor Actriz. LLEGÓ AL CINE. La popularidad lograda en telenovelas le abrió las puertas del séptimo arte con Gavilán o paloma (1985), biografía de José José en la que ella interpretó a Anel. HUMBERTO ZURITA, SU COMPLEMENTO EN EL AMOR Y EN EL TRABAJO La llegada de Christian Bach a México causó furor entre los galanes de moda; uno de ellos fue Guillermo Capetillo, quien la pretendió mientras actuaron en Los ricos también lloran. La rubia ya había sido contratada para protagonizar una fotonovela al lado de Humberto Zurita, con quien posteriormente participó en la telenovela Soledad (1980), producción de Valentín Pimstein en la que fortalecieron una amistad que en principio derivó en un pacto para dejar de fumar, y luego en una sociedad teatral llamada ZUBA, entre cuyos éxitos destacan Atrapada, Severa vigilancia, Dulce Caridad y El beso de la mujer araña. “¿En qué momento me enamoré de él? No sé exactamente. Él tenía su novia (Rebecca Jones) y yo tenía mi novio; incluso salíamos juntos. Pero el público nos unió porque, cuando salíamos de gira con una obra llamada Atrapados, le preguntaban: ‘¿Por qué no andas con ella?’”, contó a TVyNovelas. Al paso del tiempo, la amistad se convirtió en romance, y pronto lo formalizaron de singular manera, recordaba la rubia: “Salimos de grabar de Televisa San Ángel en autos separados, en un semáforo se me emparejó y me preguntó: ‘¿Quieres casarte conmigo?’. Me arranqué, y cuando nos tocó la siguiente luz roja le respondí: ‘Sí, nene, pero párate y pídemelo bien’”. Así comenzaron a escribirse 33 años de matrimonio en los que, además de protagonizar varias telenovelas y fundar dos casas productoras, procrearon dos hijos: Sebastián y Emiliano, y sobrevivieron a un mar de chismes siempre cifrados en la confianza del uno en el otro. “¿Cómo definiría en pocas palabras mi matrimonio? Una vida feliz, compartida con la persona que quiero”. Ironías de la vida: en una entrevista concedida a la revista Buen Hogar en 2008, Christian Bach sostuvo en son de broma. “Para que el matrimonio dure toda la vida hay que morir joven”.
LA BODA DEL AÑO. La pareja se casó el 3 de febrero de 1986 en una iglesia de la Ciudad de México. Asistió una multitud porque entonces la pareja protagonizaba la telenovela De pura sangre. TVyNovelas dio cuenta de todo lo ocurrido. FIESTÓN. Ciento ochenta personas asistieron a la recepción. Los padrinos fueron Ernesto Alonso, Carmen Montejo, Silvia Pinal, Angélica María y Héctor Mendoza. El vestido que usó fue el que lució en Bodas de odio, y fue regalo del Señor Telenovela.
VIAJE INOLVIDABLE. Emilio Azcárraga Milmo, Presidente de Grupo Televisa, les obsequió el viaje de bodas: tres meses por todo el mundo.
SUS TESOROS. En principio, a ella no le interesaba casarse ni tener hijos, pero cuando la necesidad de ser madre llegó, dijo: “Me gustaría tenerlo con Humberto. Y cuando nació Sebastián, para mí fue un parteaguas. Él y Emiliano son lo más importante de mi vida”.
¡CAUSARON FUROR! Siendo novios, ella y Humberto Zurita protagonizaron De pura sangre (1985), en la que sus candentes escenas incendiaron la pantalla. La tónica se recrudeció ya casados en Encadenados (1988). Ella obtuvo el Premio TVyNovelas a Mejor Actriz. PAREJA EXITOSA. La sintonía laboral de la pareja los convirtió en productores de la telenovela Bajo un mismo rostro (1995), protagonizada por Roberto Blandón, ella y Alfredo Adame. NUEVOS AIRES. En 1996, Christian y Humberto iniciaron nueva etapa como productores de la mano de TV Azteca, donde produjeron La Chacala (1997), Azul tequila (1998), El candidato (1999), La calle de las novias (2000) y Agua y aceite (2002). VILLANA DE CEPA. Estos personajes fueron sus consentidos, ya que, en su opinión, atrapaban más al televidente. Aquí en La patrona (2013), al lado de Aracely Arámbula y Jorge Luis Pila. La última fue La impostora (2014), también producida por Telemundo. SER MADRE FUE SU PRIORIDAD EN LA VIDA Cuando Christian Bach llegó a México (1979) no conocía a nadie, pero se enamoró de nuestro país. “Fue amor a primera vista. En Argentina vivía con mis papás, tenía firmados importantes contratos de trabajo; la lógica era que, una vez que cumpliera con los de aquí, me regresara, porque llevaba cinco años de carrera y era de las actrices jóvenes más importantes. Fue una cuestión de entraña lo que sentí, me encantó México, la empresa que me ofreció un contrato de tres años, las personas que conocí... Y me gustó para que fuera el hogar de mis hijos. Le hablé a mis papás, se hicieron cargo de los contratos y me quedé”. Con todo y lo que logró como actriz y productora de cine, teatro y televisión, nada igualó al nacimiento de sus hijos Sebastián y Emiliano. “Convertirme en madre fue un parteaguas en mi vida; de hecho, cuando nació Sebastián conocí lo que es el verdadero amor: el de los hijos, el que no cuestionas. Ser madre es mi prioridad en la vida, incluso he rechazado muchas oportunidades de trabajo por ellos, pero no me arrepiento. La mejor producción de Humberto y mía han sido nuestros hijos, y nuestro mayor éxito como padres es que ellos se quieran, se admiren y se cuiden uno al otro”.
Y en ellos se cifraron siempre sus más grandes sueños: “En la vida hay muchas cosas por vivir, pero en el día a día, mi principal sueño es tener a los hijos que tengo, ¡son dos tipazos! No puede haber en mi vida nada más importante que ellos. Lo demás son obligaciones creadas”, dijo en una entrevista para Telemundo. “ME HUBIERA GUSTADO TENER MÁS HIJOS, PERO SE ME PASÓ MUY RÁPIDO LA VIDA” ¿Te arrepientes de no haber tenido más hijos? Me hubiera gustado, pero se me pasó muy rápido la vida. Pero lo importante es tener pocos hijos para darles una mejor educación y más cantidad y calidad de tiempo. Nosotros siempre hemos estado con ellos. ¿Te quedaste con ganas de una niña? Humberto más, porque él tuvo 10 hermanos. Pero haber tenido dos varones me parece maravilloso, porque hoy yo soy la ganona, la reina de la casa.