En entrevista, Gabriel Soto nos aseguró que ya no le preocupa ser galán
A Gabriel Soto los 41 años le llegaron con grandes bendiciones, pues el actor asegura que vive una de las mejores etapas en su vida, con más madurez como persona y actor.
Junto a su amada Geraldine y sus hijas, Elissa Marie y Alexa Miranda, disfruta de la nueva oportunidad en su carrera como protagonista de Vino el amor.
Son 20 años los que respaldan laboralmente al galán, quien a pesar de ser considerado uno de los más bellos de la pantalla chica, nos asegura que a esta edad, a él ya no le importa si luce físicamente bien en la pantalla, sino hacer vibrar a la gente con las emociones que transmite al interpretar cada una de sus escenas.
¿Cuál es el reto al que te has enfrentado con este personaje?
David Robles es de los personajes más complicados que me ha tocado interpretar; al principio de la historia sufre una gran pérdida, lo cual lo hace un personaje no amargado pero enojado con la vida. No es el típico protagonista que todo lo hace bien, al contrario, puede llegar hasta a ser ogro.
¿Emocionalmente lo tienes equilibrado?
A lo largo de los años uno va tratando de salirse lo más rápido posible de ese sentimiento que deja en una escena; es complicado, pero hago yoga, box y eso me ayuda mucho, son mi terapia, porque saco todo. Como actor hay que saberse meter al sentimiento y saber salir.
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