JACQUELINE BRACAMONTES pone un alto a trabajos subidos de tono por amor y respeto a sus hijas
TEXTO: GERARDO ESCAREÑO FOTOS: JOSÉ LUIS RAMOS, IG JACQUELINE BRACAMONTES, ARCHIVO
Jacqueline Bracamontes tiene muy claro lo que no quiere en su vida laboral, y es precisamente realizar escenas candentes en sus trabajos actorales, y no precisamente por respeto a su marido, Martín Fuentes, sino por el amor que le tiene a sus cinco hijas. La conductora nos platica sobre esto y cómo vive el proceso de ser madre de sus pequeñitas. “QUIERO VERLAS SONREÍR” Educar a cinco hijas no debe ser fácil... ¡Ay, es complicado! Lo primero que quiero es que sean felices, verlas sonreír... Yo les digo: “En esta vida venimos a ser felices, a buscar lo que nos hace felices”. Quiero que crezcan como unas mujeres de bien, respetándose y queriéndose a sí mismas. ¿Ellas saben bien a qué se dedica su mamá, que es una figura pública? Aún no lo entienden bien; de hecho, trato de no mezclarlas mucho y no lo comprenden aún. Una de las cosas más complicadas de esto es tener que estar expuesta si sucede algo en tu vida, se entera todo México, o si tomas una decisión importante, también la compartes con el mundo.
Hablando de eso, en el plano actoral, ¿te permitirás hacer escenas candentes? En ese aspecto, más allá de si lo he platicado con Martín, es más bien por mis hijas. Un beso, tal vez sí, es parte del personaje, pero hacer escenas como las que ya hice antes, yo creo que hoy no lo haría. ¿Por qué? Por mis hijas, porque ellas se preguntarían: “¿Por qué estás con otro hombre que no es mi papá?”.
“ESTOY PLANEANDO EL SEGUNDO LIBRO” ¿Con Martín ya tocaste ese tema? No ha habido chance porque me he centrado en trabajos como la conducción y no ha llegado el momento. Veremos más adelante si se tiene que conversar. ¿Hablarás con tus hijas en algún momento de los escándalos y cosas que se hablaron de ti en los medios? De entrada, ahí está el libro, ellas lo van a saber todo por ese material. De hecho, ya estoy planeando el segundo, tal vez en unos 20 años me pondré a escribirlo, pero ahí está todo escrito para el día que quieran leerlo.