La visita de JAIME CAMIL a México dejó ver al actor sin un rastro de envejecimiento
TEXTO: GABRIELA DE LOS SANTOS Y GERARDO ESCAREÑO FOTOS: JAVIER ARELLANO, IG JAIME CAMIL, GETTY IMAGES
Jaime Camil regresó por unos días a su tierra natal, México. El actor, quien lleva poco más de una década viviendo en Estados Unidos, pisó estas tierras para presentarse en un evento junto a la youtuber de 14 años, La Bala. A diferencia de otras ocasiones, vimos al actor muy tranquilo, en paz y respondiendo a todos los cuestionamientos de la prensa. Estar del otro lado de la frontera lo ha hecho mantenerse con una vida llena de “paz espiritual” y éxito, eso sumado al amor de su esposa, Heidi Balvanera, y la energía que le inyectan sus hijos: Elena y Jaime Jr. LATINOS UNIDOS ¡Qué bueno verte por México! Sí, ya extrañaba estar aquí. ¿Cómo te sientes al estar rodeado hoy de puros niños? Gracias a Dios todavía no llegamos a la fecha de caducidad, así que muy contento. ¿Cómo te ha ido en Estados Unidos? Muy bien, el final de Jane the Virgin (la serie estadounidense en la que debutó con éxito) fue algo muy emotivo, muy bonito, y empiezo a filmar Broke el primero de octubre. Omar y tú se han encargado de representar a las celebridades latinas, ¿cómo lo han manejado? Unidos, eso es lo más importante. Apoyarnos el uno al otro, y si hacemos un proyecto, siempre invitamos a los otros y viceversa; cuando hay envidias o tonterías de esas no se avanza, por eso es importante estar juntos. ¿Se hablan para los castings? Siempre, cuando me preguntan: “¿A quién me recomiendas para este papel?”, yo les digo: “A Ana de la Reguera, a Kate del Castillo o también a Diego Boneta”... Siempre nos estamos recomendando.
“MI ESPOSA ME DA UNA PAZ TREMENDA” ¿Qué hay por allá que los tiene rejuvenecidos a todos? Te agradezco; no tengo idea, creo que es el estilo de vida. Hay menos estrés, tengo dos hijos maravillosos y mi esposa me da una paz tremenda, yo creo que si te sientes en paz interna, lo transmites. ¿Cómo le haces para que no pasen los años? ¿Cómo que no? Ve mi pelo blanco (risas). Lo que pasa es que hay que mantenerte sano: no tomo, no uso drogas, tengo una vida muy sana, hago mucho ejercicio, y creo que eso ayuda. ¿Cuántas horas haces? Una hora y media. “NUNCA ES FÁCIL, PERO TUVE UNA BENDICIÓN MUY GRANDE” ¿Ya te acostumbraste a tus canas? Siempre me acostumbré, me lo pinte sólo para proyectos en los que Rosy Ocampo quería verme más joven, y me pesaba ir al salón cada mes a retocarme, pero ya pasó eso. ¿Tu familia cómo está? Muy felices de la vida allá, pero siempre he dicho que donde me llamen, ahí voy a trabajar, incluso a México; siempre vendré con una sonrisa y agradecido por la bendición de tener trabajo. ¿Cuál es el secreto para un matrimonio tan unido? Estamos juntos desde hace como 14 años. Antes de casarnos tuvimos a Elena. Se trata de ser tolerante, tener paciencia y, sobre todo, dar amor. Con tus hijos, ¿cómo sacas tu alma de niño? Yo soy un niño de toda la vida, espero nunca crecer ni convertirme en adulto. Tengo ciertas responsabilidades de adulto, pero trato de que mi vida diaria sea disfrutarla como un niño.
EXTRAÑA LOS TACOS ¿Ha sido fácil conseguir papeles en Hollywood que no estén encasillados en el jardinero o el mayordomo? No, nunca es fácil, pero yo tuve una bendición muy grande en mi vida que fue la serie y la gran amistad que me une con mi show runner. Gracias a Dios, ella y el canal entienden muy bien lo que es la diversidad. Si ves muy bien las campañas y las cadenas, le decimos hola y bienvenidos a todo el mundo... Es padrísimo. ¿Qué es lo primero que comes cuando vienes? Definitivamente, los tacos.