PATRICIA RAMOSCO, hermana de JULIÁN GIL, apoya la decisión del actor de ampararse en la batalla legal con MARJORIE DE SOUSA
TEXTO: OTTO ROJAS BARBOZA • FOTOGRAFÍAS: RICARDO CRISTINO, ARCHIVO
Lo que parecía estar en calma, no era así. La disputa legal entre Marjorie de Sousa y Julián Gil continúa, y se enfrentan de nuevo en otra batalla en los juzgados. El desencadenante en esta pelea que parece no tener final feliz fue el recurso de amparo en la sentencia final que interpuso la defensa del actor, lo que generó que la actriz venezolana emitiera un comunicado en el que asegura que Julián “actuó por inconformidad con el porcentaje dictado en la sentencia que se creía definitiva (20 por ciento de las ganancias), y cuestiona la veracidad y necesidades médicas de mi hijo”.
Ante tales conjeturas, la hermana del actor de telenovelas, Patricia Ramosco, sacó las garras por su familia y ventiló a TVyNovelas “los vicios” del proceso legal que comenzó en abril de 2017, luego de que Julián desapareciera todo rastro de Marjorie de sus redes sociales, y ella interpusiera una demanda de pensión alimenticia por 12 mil pesos mensuales.
“Julián apela justamente por su responsabilidad ante las necesidades que pueda tener Matías y su interés real en que al niño no le falte nada. Lo que está apelando es que se otorgue una pensión justa y un monto fijo, dada la naturaleza del trabajo inestable de Julián, en el que habrá meses en que gane mucho, y otros en los que no tenga ingresos. Marjorie pidió en el juzgado que se le impongan a Julián multas si no produce dinero, lo que es una locura. Él siempre ha cumplido con la responsabilidad de la pensión, pero ella está pidiendo desde que el niño tenía tres semanas de nacido, desde pescado hasta spa para el bebé, cosas absurdas y ridículas”, aseguró Ramosco.
La pariente del actor también mencionó que desde que nació Matías –quien está a punto de cumplir tres años–, Julián ha cumplido económicamente con su figura de padre. “La señora para vivir tiene, porque Julián le pasa dinero para ella, para el niño, para la madre, para la nana, para el chofer y para todos los que están ahí aprovechándose de esa circunstancia; ha recibido en casi tres años 200 mil dólares, pero Marjorie nunca ha acreditado los gastos reales del niño. Ella dice que paga una enfermera y son 61 mil pesos mensuales, pero no lo comprueba legalmente. La señora presenta una facturita hecha a mano en la que dice que pagó eso. En cambio, Julián sí acredita sus ganancias con pruebas legales; presenta estados de cuenta, con- tratos, recibos de honorarios, y la señora sólo muestra un recibo de gastos hecho en casa”.
Si se dividen 200 mil dólares entre tres años, Marjorie habría recibido, en promedio, una cantidad de 105 mil pesos mensuales para Matías, lo que significa 28 salarios mínimos mensuales en México. “Como lo ha dicho ella misma, Marjorie de Sousa no fue ni esposa ni pareja oficial de mi hermano, tampoco vivió años con él ni nada. Esto fue una relación eventual de una sola noche en la que nació un niño, y al niño hay que darle amor, cuidados y mantenerlo. Julián está apelando por esa injusticia que se está cometiendo en su contra, porque les recuerdo que él tiene una vida, otros hijos, gastos, y lo que está percibiendo esta señora es totalmente absurdo”.
“ES HUMILLANTE VER A UN HIJO EN UN CENTRO DE CONVIVENCIA”
Ramosco defiende a capa y espada la apelación de Julián en que Matías goza de buen estado de salud. “Todos sabemos que el niño está totalmente sano, dicho por los peritos médicos. No hay ninguna razón para que Julián tenga que ver al niño en un centro de convivencia; es algo totalmente deprimente, humillante y que va a marcar la vida de ese niño siempre. Esas visitas no las terminó Julián, sino que la directora del centro las canceló. Julián se negó a ir al centro de convivencia, decisión que mantiene y tiene sus razones. No hay ningún motivo para que él tenga que ver a su hijo en ese lugar, que es casi una cárcel. Si ella quiere exponer a su hijo a esas bajezas, es su problema. Julián no va a apoyar eso a conciencia de que le está haciendo daño a su hijo”, aclaró Patricia, y continuó: “Julián ha hecho lo imposible por tener una relación sana paterno-filial con Matías. Dentro de esa lucha, el centro de convivencia no es el lugar idóneo para que un niño que está sano pueda convivir con su padre. Lo que está apelando mi hermano, lo apelaría cualquier hombre o mujer, porque esto no es un problema de género”. Para la hermana del actor, Marjorie busca a como dé lugar que él no esté presente en la vida de su hijo, y sólo “quiere lucrar con el proceso legal”.
“SIEMPRE SE SUPO QUE SE APELARÍA”
Patricia confiesa no entender la sorpresa de Marjorie por la apelación, pues no es una decisión repentina. “El proceso está retrasado desde que comenzó, y tal vez nunca debió iniciar. Está tan viciado, ha habido tantas mentiras, tantas acusaciones falsas, que no sé por qué le causa sorpresa a esta señora que el juicio se retrase más. Obvia- mente una persona con dos dedos de frente se va a defender”, expresó Patricia.
La última vez que Julián convivió con su hijo fue en agosto de 2019, cuando dijo que el pequeño lo veía como a un extraño. “Es lamentable que la propia madre sea quien exponga a su hijo a tanta humillación y a dejarlo huérfano de un padre vivo”, lamentó Ramosco.
DISPUTA
Julián Gil se ampara a la decisión del juez de otorgar el 20 por ciento de sus ganancias a Marjorie como parte de la pensión del hijo que tienen en común.
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