La actriz Karla Gascón nos regaló una sesión fotográfica en la que se mostró como nunca la habíamos visto
TEXTO: Alejandro Salazar Hernández FOTOS: Olga Laris Por el cariño que guarda a TVyNovelas, Karla Gascón nos concedió su primera sesión fotográfica como mujer tras dejar en el pasado a Carlos. El lunes pasado se sometió a una liposucción para tener una silueta más femenina, y días antes dejó testimonio de esta primera etapa en el universo femenino derrochando esencia de mujer. “YA ME SIENTO JENNIFER LOPEZ” ¿Cómo te sentiste en la sesión fotográfica? ¡Fenomenal! Ya me siento Jennifer Lopez (risas). Olga Laris es una genio; es muy difícil encontrar un fotógrafo que me retrate bien; agradezco haberme topado con alguien que me ha sacado un ángulo bien y bonito. Hace unos días desfilaste en el Fashion Week, convirtiéndote en el primer transgénero en hacerlo, ¿cómo catalogas la experiencia? Maravillosa. Pocas cosas me hacen sentir nerviecitos en el estómago, y esa ocasión fue así; no sabía si iba a poder dar tres pasos seguidos sin caerme. La cuestión fue que los 30 metros que re- corrí se me hicieron como tres kilómetros, ¡parecía que no se acababan nunca! Además, la gente me miraba raro y dije: “¡Dios mío, qué hace esta mujer!”. Perdona, Lupita Jones, que me hayan permitido participar en esa pasarela (risas). ¿Te imaginaste alguna vez en escenarios así? Sí, y creí que iba a suceder antes. Ojalá se repita de otra manera y con algo que no se marque la tripa. Por cierto, ¿qué opinión te merece la postura de Lupita de que un transgénero no participe en un certamen de belleza? Fatal, porque en este caso, Miss España es una mujer igual que cualquier otra; si no, que Lupita venga con estudios científicos y demuestre lo contrario. De otra manera, si es sólo una opinión, se ha equivocado. Cuando se desconoce algo, es mejor callar y no decir falsas verdades, porque luego esas palabras hacen que algunas personas tomen decisiones equivocadas. Y bueno, no voy a culpar a nadie de lo que hace, pero hay que medir también las cosas que se hacen. No se trata de no ser como uno es ni de pensar lo que uno piensa, sino de saber lo que se piensa y ser razonables con lo que se piensa. Punto. “ME SORPRENDE EL TIEMPO QUE TARDO EN SALIR DE CASA” Tú sugeriste el vestuario para esta sesión, ¿qué imagen de mujer quieres proyectar? De una común y corriente que vino a presentar su libro y nada más, no una cosa extravagante, porque a veces este rollo de los transgéneros se confunde con el cabaret y la variedad. Hay millones de nosotros en el mundo, de todas edades, y se desempeñan en todo tipo de profesiones. Ya es hora de acabar con ese rollo de que los transgéneros son algo perverso y están relacionados con la prostitución. De los accesorios, ¿cuáles son tu debilidad y por qué? Los aretes, aunque al final siempre me pongo los mismos porque no tengo tiempo ni para cambiármelos. Además, últimamente he traído mil cosas de diseñadores amigos míos y otras que he diseñado y no me he podido poner ni uno porque me levanto por la mañana, salgo corriendo y se me olvida todo. Desde los cuatro años sabías que habitaba una mujer en ti... Sí, y lo que no sabía es que era como un león, porque ahora me siento como El Rey león (risas). ¿Cómo ha sido este ingreso de lleno al universo femenino? Simpatiquísimo. Yo lo veo desde fuera y me siento exactamente igual porque vengo de un rollo de la actuación; ahí me he convertido en tantos personajes que realmente no me causa ninguna impresión verme de una manera u otra. He sido pirata, gitano... de todo. Entonces, no es una cosa que me impacte y diga: “¡Ay, qué cosa más rara estoy haciendo”. Yo lo veo normal. De lo que desconocías, ¿qué es lo que más te ha sorprendido? El tiempo que tardo en salir de casa. Antes me quejaba del tiempo que tardábamos en llegar a cualquier evento por culpa de mis parejas, y ahora resulta que tengo que pedirles perdón porque soy yo la que tarda más. Y luego que siempre me siento gorda, lo tengo que decir. Es una cosa que yo no creía tampoco, y ahora todo el tiempo me miro y digo: “Es que estoy gorda, es que me sobra esto, es que me falta lo otro”. Estoy muy clavada ante la gordura no sé por qué. Quizá porque no hago más que comer. “QUIEN ME ATAQUE DEBE TENER CUIDADO CONMIGO” ¿Qué es lo que más te ha gustado de este universo? Ser yo. A mí me encanta expresarme como soy. También la libertad; la mujer es más libre de desarrollarse y expresarse, mientras que el hombre está condicionado a comportarse de cierta manera. Las mujeres también, aunque gozan de mayor libertad creativa, y como yo soy una persona muy creativa, estoy encantada en ese aspecto. ¿Qué es lo que más te ha disgustado? El trato vejatorio que hay hacia la mujer siempre, y ese machismo que está impreso en la sociedad porque es una lucha constante. Antes, siendo hombre, ya luchaba en contra de eso, pero es prácticamente imposible deshacerse de todo ello en nuestras sociedades. Hay que evitar eso, todos somos iguales. Lo que deben hacer las personas más capacitadas es empezar a ver lo que hay dentro de cada uno de nosotros y no lo que hay fuera, porque si nos vamos a guiar por lo que se tiene debajo de las piernas, vamos mal. Desde tu regreso a México como Karla te has convertido en objeto de admiración, pero también de muchos ataques, ¿cómo los tomas? Superbién, porque me encanta pelearme. Me siento con la capacidad para defenderme de cualquier tipo de ataque, de cualquier pregunta absurda o comentario estúpido porque, además de mi bagaje cultural y de portar la razón, mi inteligencia me lo permite. Es muy complicado que me puedan marear por algún lado, no los veo capacitados para ello, aunque suene pedante. Además, soy un ser humano que vive en este planeta y tiene los mismos derechos que cualquiera, y no se los tengo que pedir a nadie, porque me lo merezco simplemente por el hecho de existir como cualquiera de nosotros. Entonces, su respeto y tolerancia se lo pueden meter por donde les quepa (risas). Soy bastante grosera porque vengo de barrio; entonces, aunque me vean ahora como modelo de video musical, la verdad es que meto unos sopapos con mano abierta que... Quien me ataque debe tener cuidado conmigo. Ser en México un suceso, ¿te halaga, te incomoda? Tiene las dos versiones. Es muy bonito que tanta gente me haya tomado como adalid de una causa, pero también es incómodo que te den esa encomienda porque no sabes si la vas a poder llevar a cabo. ¿Ya te ofrecieron trabajo en México? De vedette (risas). No, aún no, y no creo que algún productor estuviera esperándome con los brazos abiertos. Además, los personajes no surgen así para que yo los haga, pero yo encantada de que, cuando me toque el turno, ponerme a disposición de quien sea y dar todo lo mejor de mi arte.