Sus escenas con Cristián de la Fuente fueron las causantes de la crisis.
Fue en 2009 cuando Karyme Lozano decidió, después de la dolorosa muerte de su padre, don Eduardo Lozano, cambiar el rumbo de la vida que había llevado hasta ese momento: era noviera, posó desnuda para una revista y tuvo a su hija con el actor Aitor Iturrioz sin estar casados.
Después de esto no participó más en telenovelas, según ella, ?que denigraran a la mujer?, lo que la dejó fuera de la pantalla chica por algún tiempo, mismo en el que se dedicó a compartir su testimonio de fe en la religión católica y el cambio radical que tuvo en diversos lugares del mundo, llevada de la mano de su amigo y guía espiritual Eduardo Verástegui, quien por esas fechas también decidió dedicar su vida a la religión.
En mayo de 2011 encontró el amor de su vida en Michael Domingo, un hombre dedicado, al igual que ella, a la fe católica. Ambos guardaron abstinencia hasta febrero de 2012, cuando se casaron en Cancún, Quintana Roo.
Luego de varias pláticas regresó a trabajar a Televisa de la mano del productor Carlos Moreno en la telenovela Quiero amarte, quien le brindó todas las facilidades para que se sintiera cómoda con su personaje.
Sin embargo, fue después de que empezaron a salir al aire escenas de pasión entre ella y su compañero Cristián de la Fuente, que su esposo muy molesto le reclamó, diciéndole que lo había defraudado. Tal fue el enojo de Michael, que le puso un ultimátum y le dio a elegir entre su matrimonio o el trabajo.
Una amiga de la actriz nos contó que el marido de Karyme “se encuentra indignado por las escenas de cama que hizo con Cristián de la Fuente. Y es que cuando decidió regresar a trabajar en telenovelas, le dijo que su personaje sería de una mujer íntegra, hasta pidió que no hubieran escenas de besos de ?lengua?; sin embargo, hubo varias en las que, además de besos, hubo cama y se sugiere la relación sexual, y aunque trataron de que todo fuera sugerido, al principio sí mostraba más cuerpo, eso causó el enojo de Michael.