Durante su asistencia a la cita de convivencia, a la que Julián Gil debió llegar, la actriz se comportó amable, convivió con fans y llego sin guaruras
Esta mañana, en punto de las 10:30 horas, la actriz Marjorie de Sousa acudió a los Tribunales de lo familiar de la Ciudad de México acompañada de su hijo Matías para cumplir con su cita en el centro de convivencia familiar supervisada, en la que el infante pasaría una hora con su padre Julián Gil, quien no asistió a esta reunión pactada por el juzgado 12 de lo familiar. En esta ocasión a su salida la venezolana se mostró con una actitud muy diferente a la que había tenido en ocasiones pasadas, en las que se había negado a dar entrevistas, llegar con guardaespaldas, empujar a la prensa y haber huido en su camioneta.
La artista sorprendió a los pocos medios que estaban presentes, pues en una esquina muy reservada del lugar salió muy despreocupada con su pequeño en brazos sacándose fotos con fans que llegaron con globos y algunos curiosos que se acercaron.
Al término de este encuentro su abogada Alma Pellón declaró a la prensa que el histrión no ha pagado el 20 por ciento de pensión provisional que decretó el juez y que no ha ganado el juicio para ver a su hijo fuera de los tribunales.
“Se han solicitado las multas correspondientes, están todavía en trámite en el juzgado.... Y no se le ha descontado nada a Julián de la pensión provisional” y sobre la convivencia del pequeño con el actor en casa, agregó que el abogado de Julián Gil, Arturo Carmona no tiene la información correcta: “Es falso, esa sentencia la perdieron. La tenemos ganada nosotros”.