TEXTO: GRISEL VACA, FOTOGRAFÍAS: PAULINA MUNIVE
Como muchas mamás en México y en el mundo, Natália Subtil ha enfrentado la hermosa bendición de ser madre pero sin el apoyo de un hombre a su lado, y al igual que muchas otras mujeres, la modelo brasileña ha trabajado mucho para sacar a su hija Mila adelante, además de disfrutar cada momento de alegría que le da la pequeñita de dos años. Platicamos en exclusiva con Natália de esto y muchos otros temas que ha vivido desde los 28 años, cuando se enteró de que su beba venía en camino. “ME SENTIRÍA MAL DE DEJAR A MI HIJA PARA SALIRME A DIVERTIR” ¿Cómo has vivido la aventura de ser mamá? Sólo lo sabes cuando tienes a tu bebé en tus manos, porque la gente puede decirte mil cosas sobre la maternidad, pero realmente tú lo vas descubriendo poco a poco, porque cada día se aprende algo nuevo. A mí, Mila me enseña cosas todo el tiempo. ¿Qué has aprendido de ella en estos dos añitos? Muchísimo: me enseñó a tener mucha paciencia y, sobre todo, algo muy importante: que no la puedo moldear, porque los niño nacen con su esencia, con su carácter; los puedes educar pero ellos ya vienen con sus personalidad, y la de mi pequeña es muy fuerte, aunque al mismo tiempo muy linda. En la escuela me dicen que es una niña muy noble.
¿Qué ha sido lo más duro que has enfrentado como madre? Hacerlo todo sola, cuando tengo que trabajar y no hay con quién dejarla y nadie puede recogerla en su escuelita... ¡es la locura! Eso es de lo más difícil, aunque quisiera poder multiplicarme, hasta ahora he logrado hacerlo y ahí voy. ¿No te ayudan sus abuelos? Sí, de hecho ellos pagan su escuela. Su abuelo Sergio, por ejemplo, nunca me dice que no y siempre encuentra la manera para ayudarme y que Mila esté bien, es muy lindo; luego, cuando se las dejo, hasta Issabela, su esposa, bromea y me dice: “Tienes que salir a divertirte también, no sólo dejarla aquí para irte a trabajar”, pero todavía no me atrevo. ¿Por qué? Es muy raro, creo que encuentro la diversión en el trabajo, pero la verdad me sentiría mal de dejar a mi hija para salirme a divertir. Ese es otro tema: la culpa que cargan muchas mamás... Sí, yo sé que también tenemos derecho de salir a bailar, a cenar con las amigas, que la vida no se acaba cuando eres mamá y que de hecho se comienza un nuevo ciclo, pero obviamente, como mamá, sientes culpa de dejar a tu bebé y piensas: “¿Y si le pasa algo porque me salí de fiesta?”; no sé, es algo con lo que todavía estoy batallando. “A SU DEBIDO TIEMPO LE EXPLICARÉ LAS COSAS, ELLA VA A CRECER CON LA VERDAD” Afortunadamente tienes el apoyo de sus abuelos, ¿eso de alguna manera te ha facilitado el camino? Sí lo facilita, pero no es lo mismo que vivir y tener alguien a tu lado, porque yo podría trabajar y mi pareja pasar por la niña a la escuela, o así en otras cosas; pero he ido resolviendo los temas poco a poco, así que no es imposible.
¿Te pesa el hecho de que tu hija no tenga una figura paterna? Antes me pesaba, pero ya no; antes rogaba para que su papá estuviera presente, pero ya me cansé de rogar. Obviamente le hace falta el lado paternal, pero creo que el destino de mi hija es así, diferente: dicen que los niños escogen la familia en la que van a nacer, y de alguna manera Mila eligió ser mi mejor amiga y estamos juntas todo el tiempo. ¿No te pregunta por su papá? No, aunque desde muy chiquita ya identificaba en la tele, por las caricaturas, a la “mujer-mamá” y al “hombre-papá”, inclusive a algunos de mis amigos les decía “papá” y uno de ellos, que es gay, le contestaba: “Soy tu tía, no tu papi (risas)”, pero ya se le pasó esa etapa a mi niña. Claro que a su debido tiempo le explicaré las cosas, ella va a crecer con la verdad, sabiendo lo que pasó. ¿Has pensado en la posibilidad de rehacer tu vida con alguien más? No sé. Después de que eres mamá te vuelves más selectiva, y la verdad todavía no me siento lista para eso... Es difícil, cuando tienes una niña piensas mucho en cómo vas a confiar en alguien que de alguna manera es un extraño, es complicado. ¿Te animarías a tener otro bebé más adelante? ¡Sí! Me gustaría uno más, pero quisiera tenerlo de una manera “normal”, con una pareja, y disfrutar mi embarazo de la mano de alguien, salir a pasear con mi pancita y esas cosas que no hice en mi embarazo.
Después de todo lo que has vivido, ¿qué significa para ti ser mamá? Es difícil contestar, pero para explicarlo voy a compararlo con algo que tal vez suene ridículo, pero de alguna manera es como la menstruación: cuando llegas a cierta edad, tu cuerpo naturalmente tiene que menstruar porque eres mujer, y ser madre es casi lo mismo: de forma natural se da, es lo más bonito que te pueda pasar, por eso me da mucha tristeza que los hombres no puedan sentirlo, que no puedan tener un ser vivo dentro de su pancita, porque es una experiencia increíble, excepcional. ¿Qué les dirías a muchas mujeres que, como tú, tienen que sacar adelante a sus hijos solas? Fíjate que muchas mamás me lo preguntan en las redes sociales, pero lo cierto es que cada mujer tiene una experiencia diferente, por eso no trato de contestarles cómo se le hace, mejor les mando mucha luz; al principio pueden pensar que no hay salida, de hecho yo misma pensaba que mi vida había terminado, da mucha tristeza estar sola en ese momento, pero yo les digo que en un futuro van a entender por qué Dios las eligió a ellas, quizá porque son muy fuertes pero todavía no lo saben; eso lo aprendí ahora y no antes, porque antes estaba como ellas, con muchas dudas... También les digo que disfruten su embarazo y cada momento con sus hijos, porque el tiempo pasa muy rápido.