Aunque ya tenía una sólida carrera en Chile, el cantautor NEVEN ILIC se hizo de fama internacional con su exitoso debut en el Festival Viña del Mar 2019

TEXTO: ODETH FIGUEROA FOTOGRAFÍAS: HÉCTOR GARCÍA,

El nombre del chileno Neven Ilic llamó la atención de los organizadores de la más reciente edición del Festival Viña del Mar; sus temas inclusivos y de amor al prójimo le dieron un lugar en el escenario de la Quinta Vergara.

Platicamos con él sobre lo que significó este paso en su carrera profesional, pero también en su lucha por crear un medio musical más justo, equitativo y tolerante para las mujeres y los hombres que se atreven a vivir su vida sin ataduras y sin pensar en el qué dirán.

“LLEVO MUCHO TIEMPO HACIENDO MÚSICA, PERO SI LA VIDA NOS JUNTÓ EN ESTE ESCENARIO, POR ALGO FUE”

¿Cómo fue la selección para ir a Viña del Mar y de qué forma te ayudó esto para dar impulso a tu carrera?

Todos los músicos sueñan con pisar el escenario de Viña del Mar, siempre están mandando composiciones, interpretaciones. Es sólo un chileno el que representa a Chile en la categoría internacional, entonces, es un proceso superdifícil, pero el año anterior a mi participación, varias bailarinas y bailarines audicionaron para ser parte del ballet del festival con dos sencillos del disco que acabo de lanzar, y la producción preguntó: “¿De quién es la canción que varios están repitiendo? Suena superbién”. Y todos contestaron: “Neven, un artista chileno, conózcanlo”. Y dijeron: “Díganle que mande canciones el próximo año porque tiene posibilidades de quedar, la canción está muy buena”. Entonces sentí como un llamado del universo, una energía de que quizás este año me podría resultar, y mandé la canción Déjame amarte, que compuse acá en México en mi gira promocional anterior especial para el festival. Un día recibí el llamado y fue impresionante; realmente ha cambiado mi carrera, me ha ayudado mucho, me ha dado una plataforma, ha sido muy enriquecedora la experiencia de representar a mi país y de estar en una competencia tan importante.

Fue muy bonito el proceso porque fue superorgánico y para el festival. Me dije: “¿De qué quiero hablar si voy a cantar delante de tanta gente?, el mensaje es superimportante”. Me gustaría hablar de que el amor todo lo puede, que el amor no ve raza ni color ni orientación sexual ni religión ni clase política... Y también hacer una metáfora cool y romántica para poder cantarle a mi país; llevo mucho tiempo haciendo música, pero si la vida nos juntó hoy día en este escenario, por algo fue. Mi talento está en mi voz, ojalá nos podamos conocer y en el fondo yo quedar en la retina y los co- razones de mi país y de Latinoamérica.

¿Cómo es tu faceta de compositor y poder colaborar con otros artistas?

Siempre me gustó componer, todo lo que he cantado en mi vida ha estado compuesto por mí. Tengo una faceta muy inspirada y orgánica con respecto a la composición, pero también me encanta la composición con desafío, con un plazo, con un cliente o con una marca. Creo que hay una receta interna para componer que tengo superinteriorizada y resulta; me encanta componer para otros artistas, para su mensaje, para su tipo de voz, para su registro, para su energía... Es muy rico escribir el material del resto y el tuyo propio; creo que hace más completa la experiencia de ser artista, de ser músico.

¿Los artistas te piden temas o tú decides a quién dárselos?

A veces me los piden o a veces conozco a un artista que le gusta mi composición o lo que hago, entonces le digo: “Me encantaría hacerte algo, si te interesa te puedo escribir algo”. Me tomo mi tiempo para hacer algo que los sorprenda y ya entonces se las mando; es algo especialmente para ellos y se dan cuenta de eso, de ahí empiezan a salir los trabajillos.

“MIS LETRAS SON INCLUSIVAS, HABLO DE SENTIMIENTOS”

Platícanos sobre tu disco...

Mi disco se llama Punto de fuga, y hago una invitación para que la gente se fugue conmigo a través de mi música, mis letras y mis ritmos, y de los momentos más oscuros que tiene la vida. Creo que la música es muy terapéutica y tiene la posibilidad de relajarnos, divertirnos y liberarnos. Es un disco que junta lo apasionados y lo románticos que somos los latinos, y tiene de todo, un toquecito de pop, un poco de urbano, tiene un par de baladas. Estoy muy contento del concepto, tiene letras empoderadoras, inclusivas, libres de género, no habla de él ni de ella, sino del sentimiento; no hay nada peyorativo en contra de la mujer, no hay nada misógino o machista, no hay una sola grosería; pero al mismo tiempo es muy directo y muy provocador, coqueto, cachondo, pero cuidando ciertos márgenes de respeto, educación y de inclusión.

¿Cómo te gustaría aportar al género urbano y del reggaetón?

Mi disco tiene mucho del género urbano; yo creo que mucha gente al escucharlo va a sentir que es prácticamente reggaetón , pero yo siento que es algo un poco más pop romántico con un toque urbano y de reggaetón. Este disco lo comencé a hacer hace cuatro años, tiene esas letras inclusivas y nada de misoginia; vengo de una familia en la que mi hermana, que es mi mejor amiga, es feminista y siempre ha luchado por los derechos de las mujeres y por ello, obviamente, me identifico como feminista, estoy en contra de todo lo que pueda degradar a la mujer o violentarla de alguna manera. Creo que ya es momento de que todos los géneros musicales, en todos los países y todos los idiomas, tenga respeto por la mujer, por los hombres, por las otras religiones, por los transgénero, por la gente diferente, por la gente auténtica.