Los Rulés afirman que aunque no son novios, el futbolista brasileño quiere mucho a su excompañera en el canal de YouTube
Texto: Nayb Canaán Fotos: José Luis Ramos
Con su particular estilo han conquistado el mundo 2.0, posicionándose como el dúo de influencers más popular de México. Jorge Anzaldo “Chinos” y Diego Cárdenas, convertidos en Los Rulés, disfrutan el éxito de su canal de YouTube, que en principio compartían con la actriz y cantante Danna Paola, quien hace un año se retiró del proyecto para cumplir compromisos profesionales en España. Estos jóvenes se muestran sin tapujos frente a las cámaras; capturan su personalidad, viajes, historias, retos, experiencias y locuras en la plataforma digital con más vistas del mundo. Actualmente, los ganadores de los Kids Choice Awards México como Revelación Digital cuentan con más de 3.5 millones de seguidores en sus redes sociales, y más de 180 millones de vistas en su canal principal, sin duda, una revolución millennial que nos cuenta su historia. ¿Cómo surgió la idea de exponer sus vidas en una plataforma que está invadida por jóvenes que manejan el mismo contenido de ustedes? JORGE: Todo se remonta al 2016, cuando empezamos a acercarnos a todo el mundo digital, el YouTube y todo eso. Fue la época en la que comenzamos a comunicarnos con la audiencia que ya nos seguía por las carreras que tenemos en solitario. Yo, por ejemplo, hago musicales desde hace ocho años, Diego es actor, hizo telenovelas, entonces, ya había un antecedente de vida pública. Los dos somos productores de teatro con obras muy grandes como Hoy no me puedo levantar y Billy Elliot. En fin, estos dos workaholics necesitaban tener otro tipo de contacto con sus seguidores, y así fue como surgió el salto al internet. Sabíamos que había mucho contenido parecido, pero tratamos de ser auténticos, no nos guiamos por un formato específico, y eso fue lo que hizo que funcionara la propuesta que hoy día es como una especie de reality show, con todos sus pros y sus contras. Entonces todo fue planificado... J: No. Estábamos de viaje en Nueva York, celebrando la Navidad, sacamos la cámara, empezamos a grabar y comenzamos a subir videos. Pero ya luego decidimos reunirnos, plantearnos la idea con más compromiso y ver el proyecto no como un trabajo, sino como una faceta nueva que nos daría más proyección. Con el tiempo todo se volcó en esto, y ahora nos dedicamos más a generar contenido para internet. El 2017 y 2018 fueron pieza clave para el entretenimiento digital, y eso terminó de impulsarnos. Al principio, Los Rulés eran tres. ¿Qué pasó con su compañero? DIEGO: En realidad, al principio éramos cuatro, porque también estaba Danna Paola. Aunque si te refieres a varones, pues sí, éramos tres (risas). Lo que pasó con Gabo es que tenía otros intereses y se salió antes del primer semestre. Él quizá no tenía tiempo suficiente para dedicarse por completo al proyecto y se enfocó en otra cosa. Danna estuvo con nosotros hasta abril del año pasado por- que tenía que grabar la serie Élite en España. Sin embargo, a veces sale en los videos, cuando nosotros vamos hasta donde está ella o cuando viene a México. “UN YOUTUBER NO SÓLO ES QUIEN SE GRABA EN SU CUARTO” En tres años, ¿cómo hacen para no agotar la creatividad? J: Realmente es ultracomplicado, pero como somos creadores de teatro, eso nos mantiene siempre la musa despierta. Nosotros hacemos de todo, desde vestuario, iluminación, coreografía, dirección... Las ideas se dan en momentos específicos, así que ya sabemos cómo nos tenemos que concentrar para que surja el material. Gracias a Dios ya no trabajamos solos, tenemos un equipo bien padre que nos ayuda con las ideas, la dirección y las estrategias para que los videos tengan éxito y a la gente le guste. Trabajamos con más de siete personas, pero por supuesto, Diego y yo llevamos la batuta y tenemos una gran responsabilidad en nuestros hombros, pues intentamos que nuestros videos sean de calidad, divertidos, que no parezcan vulgares, sino que la gente vea producción, porque un youtuber no sólo es quien agarra una cámara y se graba en su cuarto. Más allá del chiste, queremos demostrar que podemos salir de la rutina con calidad.