Camilo y Evaluna se encuentran en la dulce espera de Amaranto, su segundo hijo. La emocionante llegada del nuevo integrante de su familia los ha llenado de anécdotas dignas de recordar, mismas que los han hecho ver lo difícil que es ser padre, incluso teniendo experiencia previa en este tema, pues nunca se está preparado para enfrentarse a un escenario que pone en riesgo la integridad de las personas que más quieres.
Tal como le ocurrió al colombiano el día que Evaluna Montaner sufrió un accidente estando embarazada y mientras sostenía en brazos a su pequeña hija, un momento que recuerda amargamente.
La estrepitosa caída que vivió Evaluna con Índigo y puso en jaque a Camilo
En una reciente conversación con el podcast 40 copas con Roberto Cardona, el intérprete de “Una vida pasada” revivió el que considera, ha sido uno de los peores episodios en su vida matrimonial, ya que por un instante pensó lo peor sobre la salud de su pareja e hijos cuando ésta se cayó estando embarazada.
“A mi esposa le encanta montarse en la hamaca y todo, para dormir a Índigo. Había una que era un poquito más alta; yo estaba en una reunión, cuando de repente en el taller (donde él estaba), sonó un golpe seco”, relató Camilo sobre este día.
Además de la preocupación que lo invadió al pensar que la pequeña Índigo o su mamá podrían haberse lastimado, el cantante recordó que se alarmó aun más al pensar que este golpe también ponía en riesgo el embarazo. Por lo que su primer instinto fue correr hacia la habitación donde estaban y tratar de ayudarlas tan rápido como pudo, lo que hizo al mismo tiempo que le preguntaba a Evaluna cómo se sentía.
“Voy corriendo, me tropecé con todo y estaba mi esposa en el piso con Índigo en los brazos y la panza de este tamaño”, dijo el colombiano haciendo referencia a lo avanzado que va el proceso de gestación de Amaranto, el nuevo integrante de su familia.
El cantante reveló que se sintió culpable por el accidente de su esposa
Sobre cuál fue la escena que presenció al llegar al cuarto, el artista mencionó que ambas estaban sumamente asustadas, algo que aunque lo alarmó, le sirvió para contener sus emociones y así poder calmarlas a ellas.
“La vi y estaba llorando, muy asustada. Yo agarré a Índigo, todo bien, pero tú no quieres que tu mujer de seis meses de embarazo se caiga de una hamaca”, expresó Camilo.
Afortunadamente, este incidente no pasó a mayores y ni Evaluna, Índigo o el bebé resultaron lesionados, por lo que todo quedó en un susto. No obstante, para él es un recuerdo difícil de procesar, especialmente porque reveló que se sintió culpable de que este artefacto no soportara el peso correctamente, ya que él fue quien lo instaló y en primera instancia consideró que estaba bien asegurado.