El compositor Martín Urieta habla de grandes colegas como Manzanero y Juan Gabriel, y de él mismo dice: “Martín Urieta es mucha pieza”.
TEXTO: VÍCTOR HUGO SÁNCHEZ
Ala muerte de Armando Manzanero, el Consejo Directivo de la Sociedad de Autores y Compositores de México (SACM) decidió, por unanimidad, que sea Martín Urieta quien dirija el timón de ese barco que, admite el propio autor, no es nada fácil. Ahí se velan los intereses de creadores, protegidos y amparados por el Derecho de Autor, que los hace cobrar regalías por el uso comercial de sus canciones. Y aunque él es conocido por sus composiciones de amor, admite que su primer tema no lo compuso a una mujer, sino al pueblo que lo vio nacer: Huetamo, Michoacán. Profesor de carrera, supo que lo suyo, lo suyo, sería el mundo musical, al que ha brindado cantidad de éxitos. Hoy, a muchos años de distancia de su primera composición, es conocido y reconocido en buena parte del mundo gracias al primer tema que le compuso a un famoso: Gerardo Reyes, quien incluyó en uno de sus discos Bohemio de afición que, a la postre, se convirtió en película.
“SOY UN COMPOSITOR QUE LLEGÓ A DESTIEMPO”
“Yo digo que soy un compositor que llegó a destiempo, porque mi género ha sido el ranchero; para mí, el maestro José Alfredo es el santo patrono de nuestra canción ranchera, y yo, estando en un internado, cantaba todas sus canciones y lo admiraba muchísimo. “Pienso, sin compararme con él, que tengo mucha influencia suya en la métrica, en la rima... Cuando conocí a mi paisita Bulmaro Bermúdez, compositor de Michoacán, y le cantaba mis canciones, me decía: ‘Paisita, eres un gran compositor, pero si te dedicas a escribir nada más a tu pueblito, van a vender unas cien copias; tienes que escribir canciones de índole universal, que lleguen a un consenso general’. Pero esa canción le fascinaba por la música, por la nostalgia, por lo bien hecha; que un niño de 15 años escribiera eso, era asombroso”.
Y, ¿escribía la música?
“Todo, yo hago todo; aquí hay medios compositores: unos hacen letras y otros hacen música, pero los compositores completos son los que hacemos música y letras: José Alfredo, Juan Gabriel...
Tenía entendido que José Alfredo no escribía la música…
“Nadie. ¡Ni yo! (risas). Mira, Agustín Lara tampoco escribía música. Él se burlaba de la pauta diciendo: “Yo no necesito esas caquitas de mosca… Yo no necesito de eso: yo soy la música”.
Su paso a las grandes ligas se dio cuando, precisamente apoyado por Bulmaro Bermúdez, entró al Festival de la Canción Ranchera, que organizaba y difundía Raúl Velasco. Ni en la misma gloria era la canción que, tristemente, tuvo que ser eliminada del certamen debido a que había sido grabada por un dueto, sin que el mismo Urieta supiera, y el festival promovía temas inéditos. “Pasaron 10 años más para que yo pudiera volver a entrar a concursar”, recuerda. Y le fue mejor aún, porque fue el único compositor debutante con dos temas: ¡Qué de raro tiene! y Ayer estuve con mi nuevo amor. Aunque ninguna de las dos canciones ganó el certamen, para Martín Urieta fue su pase a la gloria, ya que se convirtieron en temas muy escuchados en la radio de aquellos años. “¡Qué de raro tiene! es mi favorita, porque, sin ganar, fue la que todo el mundo cantaba”.
¿Quién le dio más: Gerardo Reyes o Vicente Fernández?
“Gerardo; como te dije, soy un compositor a destiempo; mi anhelo era que me grabara mi paisita Amalia Mendoza “La Tariácuri”, Lola Beltrán, Luchita Villa y Marco Antonio Muñiz. Cuando me graba Gerardo, él ya iba en picada, pero él era el rey, antes que Vicente.
¿Ha perdido el piso?
“Jamás. Ya me grabaron Luis Miguel, Juan Gabriel y Kalimba. Acá entre nos, jamás me he mareado.
¿Cuántas canciones tiene?
“Te juro que no sé. Hay muchas canciones a pedido, que me compran y ni tengo el registro. Tengo una buenísima que me pidió un cuate que andaba con una mujer rusa, pero me pidió que fuera muy discreto y no mencionara su nombre o el de la chava. Le puse El enamorado, porque ella se llamaba Elena… Morado (risas).
¿Existe la musa, o es el oficio de sentarse a componer?
“La madre de una canción es la vivencia, y las que más trascienden son las vivencias tristes, las de desamor. Dice que, como presidente de los compositores, ha pugnado porque aprueben, por ley, el pago de la copia privada, que en 72 países ya se cobra, menos en México, y que los propietarios de la Arena Ciudad de México paguen las cuotas por el uso y difusión comercial de las canciones.
“Hay algo que llamamos la ‘prueba diabólica’, queremos que por ley desaparezca: todo mundo quiere eludir el pago de Derecho de Autor, entonces esta empresa dice: ‘Dennos una prueba de que ustedes tienen derecho a cobrar, presenten una constancia, un documento que autorice de todo el mundo, obra por obra’. O sea, que vayas a París a pedir a los autores, y por cada una de sus canciones que nos den una autorización; le llamamos ‘prueba diabólica’ porque nos condenan a lo imposible”.
¿Quiénes son los cinco compositores que más plata generan a la SACM?
“Ahora, el número uno es Fato. Juan Gabriel, Manuel Alejandro…
Le voy a mencionar nombres de compositores y usted me dice lo primero que le venga a la mente: Juan Gabriel...
“El genio más asombroso y raro de la historia musical; como compositor cometía errores terribles, pero se justifica porque él no tenía antecedentes académicos. Por ejemplo: una canción que dice “Si siempre yo te veo, corazón, muy de vez en cuando…”. ¿Siempre o de vez en cuando? Y, en la métrica: “Y me dejaste solo y sin mí sin nada, sin-sin dinero…”. Un compositor que tiene cultura no puede componer eso. Entonces, él sí es un fenómeno muy aparte.
Roberto Cantoral...
"Él sí fue un general de división.
Agustín Lara...
“A él se le cuestiona que si sus letras las escribía “El Chamaco” Sandoval. Tanto se cuestionó la autenticidad de Lara, que el maestro Armando Manzanero mandó quitar de la SACM un busto enorme que estaba de Agustín en las instalaciones.
Armando Manzanero...
"Él, junto a Álvaro Carrillo, geniales.
¿Qué opina Martín Urieta de Martín Urieta?
“Pienso que es mucha pieza (risas). Una ocasión Manzanero dijo en el Consejo de Administración de la SACM: “A este señor tienen que respetarlo y cuidarlo, él mismo no sabe lo grande que es”.
¿Y sí?
“Pienso que soy un compositor muy inmerso en mi género; yo no conozco nada de los otros géneros, no sé de pop, del reggaetón... nada. Yo me quedé aquí, estoy anquilosado, honestamente…
¿Qué importa más: la letra o la música?
"¡Qué buena pregunta! Los letristas dicen que la letra, pero hay un argumento irrefutable: la música es el lenguaje universal. Si Mujeres divinas la cantan en ruso, nadie sabe qué dice. La prueba está en que los clásicos no necesitaron letras: Beethoven, Mozart... ¿Cómo trascendieron si no tiene letra? Entonces tú deduce qué es más importante. Al final, y esto es verdad, nos quedamos hablando de mujeres y canciones, porque charlar con este señorón, neta, no tiene desperdicio. ¡SUSCRÍBETE A TVYNOVELAS Y TODAS TUS REVISTAS FAVORITAS! Te podría interesar: Armando Manzanero: Así fue su último cumpleaños número 85 en plena pandemia