“Soy cantante, actriz y bailarina de comedia musical y jueza de hierro de reality shows. Mi nombre completo es Dolores Vanessa Cortés Jiménez; nací el 23 de octubre de 1970 en la CDMX”.
“Soy la primera de dos hijas del matrimonio del actor Ricardo Cortés y la cantante Dolores de la Luz Jiménez, del dueto Lena y Lola. Además, sobrina nieta de José Alfredo Jiménez”.
“Mi hermana Laura es un año menor que yo; juntas vivimos experiencias buenas y malas, entre ellas, el divorcio de mis padres y el abuso de un familiar. Fue gracias a Alma Muriel, nueva pareja de mi papá, que fui a audicionar a la obra Anita, la huerfanita; saber bailar me ayudó a quedarme e iniciar mi carrera a los ocho años. Gracias a ella tengo también otra hermana, Lisa”.
“Mi infancia y adolescencia fueron difíciles; enfrenté directores muy estrictos que me sometieron a una exigencia y disciplina exagerada. Perdí momentos especiales con mi familia y amigos, aunque también viví lindos romances con Lorenzo Antonio y Alejandro Ibarra; este último hasta la fecha es el amor de mi vida”.
“Mi mamá fue determinante en el desarrollo personal y artístico de mi hermana y mío, aunque no estuvo de acuerdo que me implicara sentimentalmente con Sergio Romo, hijo de Alma Muriel y, por tanto, mi hermanastro, con quien en 1990 inicié romance a escondidas de la familia. Desde niña me fascinaba; ir a casa de Alma para verlo me emocionaba”.
“Luego de perder un bebé, desgracia que me llevó a pensar en el suicidio, nació mi hijo Mariano ‘Balón’ (1993), por quien dejé temporalmente mi carrera; me fui a vivir a Saltillo, Coahuila, entré en depresión y dejé de cantar. En 1997 nació Dariana ‘Pelota’, y a partir de ahí retomé mi carrera”.
“Aunque Sergio y yo nos separamos en el 2000, luego de 10 años de relación en los que rehuí a sus peticiones de casarnos, buscamos reconciliarnos varias veces al no encontrar una pareja con quien sostener una relación estable. Lamentablemente, nuestras ocupaciones y su oposición a que Mariano estudiara danza, nos hicieron fallar en el intento”.
“Mi vida ha estado rodeada de padecimientos y retos de familia. Por salvar a mi hermana Laura de las adicciones, en las que cayó agobiada por la anorexia, ese año perdí mi fortuna. Esa experiencia sirvió para acercarnos a nuestras hermanas Lisa y Rox, y sobre todo a mis padres. Lamentablemente, mi madre murió en noviembre de 2019”.
“Siempre he sido muy reservada con mi vida privada, pero el amor por mis hijos nunca lo he ocultado; los adoro con toda mi alma y ya me dieron la dicha de ser abuela. Sólo lamento que no quieran ser cantantes por temor a que los juzgue de la manera en que lo hago como jueza de reality shows”.
“Desde enero de 2022 mantengo relación sentimental con mi coreógrafo Elías Ajit, a quien conozco desde hace 30 años. A su lado enfrento el cáncer de mama que me detectaron en febrero pasado, y que me obligó a someterme a una mastectomía y sesiones de quimioterapia y radioterapia. Estoy luchando contra eso, porque quiero vivir para convivir con mis hijos y nietos”.