Un testamento “falso”, estrategia mediática, declaraciones sin fundamento y una mamá que sólo quiere tranquilidad para su pequeño de siete años. Todos los detalles del caso entre Maribel Guardia, Imelda Garza Tuñón, Marco Chacón, Julián Figueroa y hasta el legado de Joan Sebastian.
Tras el fallecimiento de Joan Sebastian en 2015, se desató una compleja disputa por su herencia debido a la ausencia de un testamento formal, a pesar de que la familia afirmó en múltiples ocasiones —y de manera pública— que el artista había dejado una carta con las especificaciones hereditarias para sus hijos.
Al no existir un documento legal que avalara dicha repartición, se inició una sucesión intestamentaria entre todos los herederos del Rey del Jaripeo, un proceso que se ha prolongado por casi una década. En medio de este litigio, ocurrió lo impensable: Julián Figueroa falleció en abril de 2023, lo que generó nuevas controversias no sólo por la herencia del Poeta del Pueblo, también por el legado del propio Julián, quien había formado una familia con Imelda Tuñón y tenían un hijo en común: José Julián Figueroa Garza.
Aunque inicialmente la relación entre Maribel Guardia y la viuda de Julián parecía cordial, a principios de 2025, Imelda Garza Tuñón decidió abandonar la casa de Maribel al no contar con un espacio personal, lo que derivó en un distanciamiento y disputas por la custodia del pequeño José Julián.
Las fechas claves del pleito
- 11 de noviembre de 2024 - Se crea una demanda de Maribel Guardia contra Imelda Tuñón, pero no se hace pública
- 17 de enero de 2025 - Imelda y José Julián cambian de domicilio.
- 20 de enero de 2025 - Maribel Guardia denuncia a Imelda, basada en la demanda del 11 de noviembre.
- 21 de enero de 2025 - La policía va por José Julián diciendo que el niño estaba desaparecido.
- 23 de enero de 2025 - Responde Imelda a la demanda de Maribel Guardia e informa de las irregularidades del caso por parte del Ministerio Público
- 1 de marzo de 2025 - Imelda hace público que recupera a su hijo, pero comienza una campaña de desprestigio hacia ella.
Un caso lleno de irregularidades
Ante la incredulidad pública, Maribel presentó una denuncia contra Imelda, alegando que su nieto corría peligro debido a que su madre tenía problemas de adicciones y expresó su preocupación por no conocer su paradero.
Sin embargo, el abogado de Imelda, Antonio Lozano Gracia, señaló irregularidades en el proceso: el niño seguía asistiendo al mismo colegio donde Maribel lo había visitado en numerosas ocasiones, y las autoridades habrían aplicado un protocolo inadecuado al separarlo abruptamente de su madre a la salida de la escuela.
Lozano Gracia también cuestionó la autenticidad de un presunto testamento de Julián, al detectar inconsistencias en la firma y sugerir que podría tratarse de un documento falsificado para excluir a Imelda de la herencia de su esposo. A esto se suma el pendiente de la herencia de Joan Sebastian, que, al corresponder originalmente a Julián, debería transferirse ahora a su hijo José Julián.
El caso ha estado marcado por declaraciones mediáticas controvertidas: desde las de Nagibe Abbud -sobrina de Omar Chaparro, quien luego se desligó de sus comentarios negativos hacia Imelda-, hasta las de Olivia Collins, amiga de Maribel, quien insinuó que Imelda no estaba capacitada para cuidar a su hijo. Incluso Christian Villegas, ex publirelacionista de Maribel, afirmó en programas de YouTube que Imelda llevaba “una vida disipada”, sin presentar pruebas.
Por su parte, Marcelia y Zaraela Figueroa (hermanas de Julián) han hecho declaraciones en su contra en programas de televisión, aprovechando para promocionar sus proyectos musicales.
Según Lozano Gracia, estas acusaciones —junto con el señalamiento de Maribel de que Imelda era “bipolar”— podrían tener consecuencias legales, ya que un especialista ha descartado dicho diagnóstico.
Nada cuadra en el testamento
A pesar de que nunca se reportó la existencia de un testamento de Julián y tuvo que comenzarse un proceso intestamentario, un día, de manera casual, apareció uno. El documento está fechado el 2 de marzo de 2018 y lleva la firma de Julián Figueroa.
Sin embargo, el lugar, Ixtapa-Zihuatanejo, Guerrero, hace sospechar de su autenticidad, ya que, según las redes sociales de Julián Figueroa y su agenda de trabajo, era imposible que él estuviera allí en esa fecha.
Además, la firma del documento parece temblorosa y no coincide con la de su pasaporte de 2013, ni con la del pasaporte de su hijo en 2021. Para reforzar la duda, los días 1, 2 y 3 de marzo, Julián publicó contenido diario en sus redes, y en ninguna de esas publicaciones hay indicios de que se encontrara en Ixtapa-Zihuatanejo
Marco Chacón, más que el esposo de Maribel Guardia
Aunque su relación comenzó en 1998, no fue hasta 2010 que Marco Chacón y Maribel Guardia se casaron en el Gran Cañón, en Estados Unidos, vendiendo los derechos de su boda civil a una revista.
Según Maribel, Marco siempre fue un “esposo ejemplar”, y para Julián, un tío cercano con quien compartía una relación de amistad. Chacón, con el tiempo, se convirtió en un especialista en propiedad intelectual, siendo que Maribel no componía música.
Además, es fundador del sitio www.propiedadintelectualabogados.com y tiene experiencia en litigios de derechos de autor, representación artística y contratos de entretenimiento.
Sobre la sucesión testamentaria de Joan Sebastian
Los herederos legales de Joan Sebastian incluyen a todos sus hijos y algunas viudas (debido a fallecimientos previos en la familia).
Julián mantenía una relación cercana con sus hermanas Zaraela y Marcelia, pero en la sucesión intestamentaria, las alianzas se dividieron en grupos: José Manuel Figueroa junto a las viudas de sus hermanos Trigo y Sebastián, y la última esposa de Joan con sus dos hijas, dejando a Juliana (radicada en Texas) al margen.
Con la muerte de Julián, el peso de la tercia de Zaraela y Marcelia se debilitó, por lo que -según opiniones en medios— sería importante que Marco Chacón siguiera siendo representante legal de los bienes de Julián, y no Imelda.
Respecto al caso, José Manuel Figueroa señaló: “Creo que es una traición a la ideología de mi padre, de cómo pensaba y cómo veía la vida, utilizar las cámaras para hacerse publicidad ante una situación tan dolorosa y sufrida; condeno rotundamente a cualquier hermana, sobrina o tía que utilice los medios de comunicación ante dos personas que se quieren mucho. Maribel e Imelda, les deseo lo mejor, que se solucione rápido”.