Con el estreno de la exitosa bioserie de Gloria Trevi, “Ellas soy yo”, poco a poco los televidentes van conociendo más aspectos del llamado “Clan Trevi-Andrade”, incluyendo uno de sus temas más escabrosos: el nacimiento y muerte de la pequeña Ana Dalay.
Fue un mes de octubre, pero de 1999 (es decir, están a punto de cumplirse 24 años), que la pequeña Ana Dalay, hija de Gloria Trevi y Sergio Andrade, falleció con tan sólo unas semanas de nacida. Este es uno de los misterios más emblemáticos en la vida de la cantante, pues hasta el momento no se sabe en dónde están los restos de la bebé.
María Raquenel Portillo, “Mary Boquitas”, ha sido una figura clave en el caso, pues fue señalada por su presunta responsabilidad en este hecho; sin embargo, hasta el momento no se ha obtenido claridad en el asunto debido a que las víctimas de Sergio Andrade han dado su propia versión de los hechos, y cada una es diferente.
Recientemente, “Mary Boquitas” rompió el silenció en un reciente capítulo de su podcast “En Boca Cerrada” y habló sobre el espinoso caso de Ana Dalay: cómo se vivió el nacimiento de la bebé, algunas cosas relacionadas con la muerte de la niña y hasta una extraña ceremonia de bautizo presidida por el mismo Sergio Andrade.
ANA DALAY, UNA BEBÉ DESEADA POR TODOS
Primero, “Mary Boquitas” relató el día que llegó a la casa con una recién nacida Ana Dalay en medio del júbilo de sus compañeras y, por supuesto, de Sergio Andrade: “Gloria llegó a casa con la bebé más chiquitita y más preciosa del mundo en brazos (...) estaba sana y fuerte”, aseguró.
“Gloria llegó a casa con la bebé más chiquitita y más preciosa del mundo en brazos”
Todas las mujeres que vivían en ese momento con Sergio Andrade, aseguró María Raquenel, se emocionaron muchísimo con la llegada de la pequeña y no perdían oportunidad de pedir permiso para abrazar a la bebé; sin embargo, fue en aquellos días que se desató el escándalo de Karina Yapor.
“Yo veía que Gloria arrullaba a su bebé, jamás la había visto tan feliz”, recordó Raquenel Portillo en su relato: “Yo dormía en el otro departamento con la mayoría de las chicas y los bebés, y durante el día pasaba al departamento principal donde Sergio se hospedaba siempre con Gloria”.
Sin embargo, continuó “Mary Boquitas”, el formar una familia con Gloria Trevi no le quitó a Sergio Andrade las ganas de seguir controlando al grupo de chicas: “El departamento era su anhelada isla, donde él era el centro de todo, el rey absoluto. (...) Quería jugar al sumo sacerdote, quería jugar a ser Dios y así nos lo demostró en una extraña ceremonia”.
EL DÍA QUE SERGIO ANDRADE BAUTIZÓ A ANA DALAY; “MARY BOQUITAS” FUE LA MADRINA
Raquenel Portillo se refería a esto al narrar, a continuación, una improvisada ceremonia de bautizo para la pequeña Ana Dalay en donde ella fue la madrina; Sergio Andrade tomó esta decisión debido a que la Iglesia católica se negaba a otorgar el sacramento ante la falta de documentos oficiales.
“En menos de minuto y medio, Ana Dalay estaba bautizada según palabras de Sergio”
Fue así que, de acuerdo con “Mary Boquitas”, todas las chicas que formaban parte del clan juntaron agua bendita en una cubeta y formaron un círculo alrededor de Gloria Trevi y Ana Dalay:
“Puso sus dos manos juntas con sus dedos pulgares como pistola, cerró los ojos y nos dijo solemnemente: ‘Como acá el alma más inocente soy yo, yo voy a oficiar la ceremonia’. En menos de minuto y medio, Ana Dalay estaba bautizada según palabras de Sergio”, recordó Raquenel Portillo.
Tal vez el caso de Ana Dalay nunca logre resolverse de manera satisfactoria; sin embargo, este y otros testimonios nos muestran cómo era la vida con Sergio Andrade y el extremo control al que tenía sometidas a sus víctimas.