Hace un año Sergio Mayer salió al frente a defender a su hijo y a acusar a Natália Subtil de no haber usado el dinero que le daba para los gastos de Mila, asegurando también que la niña no estaba yendo ni a la escuela.
Todo esto generó un problema entre Sergio Mayer y Natália Subtil, una guerra de dimes y diretes que al parecer llegó a su fin, pues la modelo levanta la bandera de la paz porque ya no quiere más problemas. Incluso, la visita de la niña a La casa de los famosos es la muestra de que las aguas se calmaron y que la relación está mejorando.
“LO QUE QUIERO ES ESTAR EN PAZ”
“Mila está apoyando a su abuelo en el reality, yo la he llevado a Televisa a grabar contenido para La casa de los famosos y allá se ha encontrado con Issabella (Camil) y con sus tías (Victoria y Antonia)”, nos dijo la también actriz.
Según cuenta, la relación con Sergio Mayer Mori “sigue igual, platicamos un poquito porque tenemos una hija en común, ni modo. Pero yo ya no quiero problemas, lo que quiero es estar en paz, será lo mejor”.
Ha sido, justamente, la búsqueda de ese equilibrio lo que ha hecho que la modelo brasileña dé su brazo a torcer pensando en el bienestar de la menor, ya que confiesa, hasta un viaje al exterior hizo con la recordada intérprete de Rubí, Bárbara Mori, quien fuera su suegra.
“El fin de semana, Mila se fue con Bárbara a visitar a su papá en Colombia, donde está viviendo, entonces ahí van”, asegura, mientras recalca que el joven de 25 años “no se ha hecho cargo” de los gastos y manutención que le corresponden.
Ante esta situación, Subtil admite que ha sido la única proveedora en el hogar, ya que le ha tocado hacerse responsable, económicamente, de Mila.
“Yo mantengo a mi hija, aunque los abuelos me ayudan con la escuela, lo demás soy yo. Sergio no me contesta, hablo sola en mi WhatsApp. Pero tenemos que pensar en mi hija, no en mí ni en él. Ahorita estoy en paz con ella, mientras él, creo que está en búsqueda de esa paz y está bien, no lo puedo juzgar, las personas tenemos procesos diferentes y a veces maduramos en etapas distintas. No quiero estar juzgando o hablando mal de él todo el tiempo, ya tengo un año con mi pareja y sólo quiero que todo marche hacia adelante”.
“SERGIO SIEMPRE QUIRE LIDERAR”
Desde que nació su hija, Natália ha estado en medio del candelero, la han atacado, juzgado y fichado de oportunista por la guerra mediática que ha protagonizado con los Mayer en busca de una manutención digna. Sin embargo, el tiempo le ha dado entendimiento y ya no le afectan las críticas como antes.
“Claro que fue duro, creo que la gente nunca me va a entender al cien por ciento, pero es mi vida, a veces estaba bien, a veces mal, siento que he vivido mi propio reality show, pero ahora tengo que hacer lo que sea para que mi hija sea feliz”.
Actualmente, no es la mejor amiga de su exsuegro, pero le desea el triunfo en el reality de Televisa que lo puso nuevamente en el centro de atención.
“Lo que pasa es que mi problema es con su hijo y eso a veces lo confunden. Pero Sergio es muy disciplinado y creo que su hijo no le sigue los pasos, él es un gran padre, yo le dije alguna vez a Sergio que de tener un papá como él, hubiera aprovechado las oportunidades que le dio, pero eso es asunto de cada uno y tiene que aprender”.
En relación a las tácticas de juego que ha implementado el Garibaldi en el programa, Natália afirma que él “es muy estratega, inteligente, está al pendiente de todo, quiere liderar y lo lidera muy bien”.