Más allá de un lugar para cambiarse, maquillarse o descansar, los camerinos de RBD se han convertido en un punto de reunión familiar, pues ahora que las tres chicas de la banda se casaron y tienen hijos, viajan acompañadas de sus maridos y los niños que han procreado.
En una reciente entrevista, Anahí reveló que en los camerinos “hay un playroom” para que se entretengan los menores.
La cantante, además, dijo: “Por supuesto que nuestros hijos son lo más importante para las tres y sin ellos no estamos completas”. Según la rubia del ahora quinteto, su problema es mayor ya que es madre de dos niños que van a la escuela, a diferencia de las hijas de Dulce María y Maite Perroni.
Por su parte, Maite afirmó que Lía, su pequeñita que apenas cumplirá cuatro meses de nacida, tiene su propia cuna dentro del camerino para poder atenderla apenas tenga oportunidad. La intérprete viaja con su esposo, el productor Andrés Tovar, quien se encarga de la niña mientras Maite está sobre el escenario.
María Paula, hija de Dulce María con el cineasta Paco Álvarez, también ha estado presente en este tour y hasta ha salido al escenario con su madre para saludar a los fanáticos del grupo que tiene revolucionado a todo el continente.
En el camerino de la pelirroja también hay un espacio de entretenimiento para la niña que nació a finales del 2000, justo cuando sus compañeros organizaron el concierto virtual que reavivó la llama del fanatismo.
