El actor estadounidense Kevin Spacey, acusado de haber agredido sexualmente a cuatro hombres en el Reino Unido, fue declarado inocente el miércoles, día en que cumplió 64 años, al término de un muy mediático juicio en Londres.
Tras un mes de vistas y 12 horas de deliberación, los miembros del jurado declararon a Spacey inocente de los nueve cargos que se le imputaban. Cuando se pronunció el veredicto, el actor se enjugó unas lágrimas e hizo gestos de agradecimiento.
Después, a las puertas del tribunal londinense, expresó su “reconocimiento” por este veredicto, visiblemente emocionado y aliviado.
“Estoy enormemente agradecido al jurado que se tomó el tiempo de considerar todas las pruebas y los hechos antes de tomar una decisión y acepto el veredicto de hoy con humildad”, afirmó ante los periodistas que los esperaban a la salida.
Después se subió a un taxi, mientras una admiradora le gritaba “te queremos Kevin” y otro fan le preguntaba si iba a volver a aparecer en la serie de Netflix “House of Cards”.
Unos minutos antes, cuando se pronunció el veredicto, el actor, que siempre negó todos los cargos que se le imputaban, se había secado las lágrimas con un pañuelo que le entregó el secretario judicial, situado cerca de él en la urna de cristal reservada a los acusados.
Volviéndose hacia los miembros del jurado, el actor se llevó la mano al pecho y dijo “gracias”, antes de abrazar a sus abogados. Desde que comenzó el juicio, bajo una fuerte expectación mediática, a finales de junio, Spacey había sido presentado por la fiscalía como un acosador sexual que utilizó su influencia para agredir a hombres jóvenes.
El actor, ganador de dos Oscar por sus papeles en “Belleza americana” y “Sospechosos habituales”, afirmó por su parte que todas las relaciones habían sido consentidas y afirmó que algunos hechos eran incluso pura invención de los denunciantes.