JuanPa Zurita agradece que las personas beneficiadas con el movimiento Love Army México lo hagan sentir parte de sus familias.
Su corazón se llena de emoción cada vez que visita el municipio Ocuílan y ve materializada una meta que beneficia a 50 personas que fueron afectadas con el sismo de 2017. Juanpa Zurita, más allá de un talentoso youtuber, es la pieza central de un movimiento que con el apoyo de miles de donantes hace posible que las familias que quedaron sin hogar en el terremoto de hace tres años vuelvan a tener un techo digno donde verán crecer a sus niños. Love Army México le ha permitido a este modelo y actor cumplir los sueños de muchas personas, pero también lo ha hecho encontrar una razón de ser a sus 24 años edad. En entrevista con TVyNovelas, este joven altruista nos dice cómo avanza la obra y cuáles han sido los momentos más emotivos que le han tocado vivir en este tiempo. Si bien el año 2020 ha sido bastante turbulento para muchas personas, a ti te ha permitido afianzar tu imagen en los medios, ¿cómo vives todo lo que te ocurre? Pues sí, si te puedo decir que he sido muy suertudo de poder tener un trabajo que puedo hacer desde casa, y que gracias a Dios no se limitó con la pandemia; tuvo que mutar y tuvo que evolucionar, y tuve que cambiar varias ideas, pero afortunadamente fue un año en el que también hubo un boom en redes gracias al encierro y no me puedo quejar en lo absoluto. Imperdible: Galilea Montijo cumple reto de Juanpa Zurita ¡y se desmaya! El proyecto Love Army beneficia a muchas familias que perdieron su hogar con el sismo de 2017, ¿cuántas casas comprende el proyecto? Mira, son tres años de mi vida que siguen, o sea, vamos a terminar en diciembre de este año. Son 50 casas, hay unas que ya se entregaron, otras están por entregarse y algunas se encuentran en cierre de construcción. Además de esto, todas las familias recibieron un taller con Fundación Origen en el que podían desarrollar un negocio. Entonces cada familia pudo emprender, tienen negocios de mermeladas, de licores de frutas, y me encanta porque la evolución que han tenido, más allá de una casa ha sido personal. Por otro lado, cada casa es única, cada una fue diseñada por un arquitecto y está hecha en base a las necesidades de cada familia. ¿De qué forma surgió la idea de sumarte a este movimiento? Yo creo que cualquier mexicano, el día del sismo, estaba con la impotencia de querer ayudar y no poder. Ningún ciudadano se esperó a que el gobierno actuara, todos se levantaron, fueron a recoger escombros, a entregar despensas. Ese mismo sentimiento me movió a mí, yo no estaba aquí, me encontraba en Nueva York dando una conferencia acerca de Love Army Somalia, dando resultados de la misión en ese país. Entonces la gente me empezó a escribir por Twitter, fue cuando se me ocurrió lanzar Love Army en México, en mi país, donde crecí, donde está mi familia, mi gente. Yo no podía quedarme de brazos cruzados, era irresponsable y poco ético de mi parte, así que armé la lista, le marqué a todos mis amigos y comenzamos el proyecto, sin saber a lo que estaba a punto de adentrarme porque en Somalia repartimos comida y agua, aquí teníamos que construir casas. Puedes leer: El Youtuber mexicano Juanpa Zurita se estrena en pasarela de Dolce & Gabbana ¿Qué sientes al ver ya materializado aquello que comenzó como una propuesta inalcanzable? Es muy loco y es emotivo cuando visito Ocuílan y veo a la gente que me da las gracias. Ver la casa en la que viven me pega porque me hace sentir que todo vale la pena. Vale la pena empujar los límites, vale la pena meternos en este tornado, vale la pena entrar a todo esto sin experiencia, pero con las intenciones correctas porque el sentimiento que me genera me llena y me da tanto propósito que es mágico. Y siempre que voy a la comunidad me siento como en mi casa. O sea, literal, voy caminando y saluda uno, saluda otro, sale el perro, sale el papá, el abuelo… Es como algo que me llena el corazón para siempre, y la verdad que juntos superamos las expectativas porque decidimos emprender el proyecto más ambicioso del sismo, y se logró a pesar de todas las limitantes. ¿Encontraste tu razón de ser en todo este proceso? Sí, 100%, cuando veo el impacto que puedo tener con la oportunidad y la voy que yo tengo, siento que tengo casi una misión. Pienso que todo lo que me está pasando no me está sucediendo sólo porque sí. Todo esto no puede ser sólo para mí, tiene que haber un propósito más fuerte. Esto me llena, me inspira y me motiva. Ahora que tengo esta voz siento que debo usarla en algo bueno, porque creo en la amabilidad, creo en el amor y en la unión de la gente con buena energía. He descubierto una parte de mí que me brinda el universo dándome una misión más grande. ¿Cuál fue ese momento en el que te sentiste más vulnerable? Yo creo que ese momento se acerca, siento que el decir adiós y cerrar eso va a estar fuerte porque ya casi es parte de mi vida. O sea, llevo tres años yendo todos los meses y cuando termine sentiré que una parte de mí se fue. Es que yo tengo amistades ahí, tengo una conexión emocional de un proyecto que levantamos todos juntos, pero yo creo que ha habido varios momentos de vulnerabilidad, en un inicio, cuando conocí a las familias y escuché sus historias, me pegó mucho porque me hizo pensar en lo afortunado que soy, y ver cómo esas personas se mantienen felices y positivos ante todo. Me vulnerabilizó también en los momentos duros, difíciles, me tocó se resilente y seguir porque elegí el camino correcto. También ha habido momentos en los que las familias me han invitado a comer, bien sea pozole, barbacoas, fideos, arroz, sopes, y me hacen sentir en casa, me siento protegido, con gente en la que confío, es gente que conozco y que me conocen. Te interesa: Juanpa Zurita y sus hermanos, ¿los Kardashian mexicanos? ¿Algunos de estos episodios te ha hecho llorar? Ah sí, claro. Es que soy súper chillón, soy muy emotivo. Y casi siempre lloro con las familias cuando escucho sus historias, cuando escucho sus experiencias y me dicen el significado que tenían esas casas que perdieron, es que una casa no es sólo algo material, es una vida. Luego de que esta gente tiene su casa nuevamente se va abriendo como un capullo otra vez, salen como mariposas, felices, contentos, porque perder un techo los destrozó, les quitó una parte importante de ellos. Deber ser muy importante para ti el cariño y la proximidad de esta gente, porque quizás algunos de ellos no te conocen e igual se acercan de una manera genuina… Hay muchos niños que sí me ubican y les dicen a sus papás. Ahora que salió Pequeños Gigantes me reconocen más, pero en un inicio me preguntaban si era cantante y yo les decía que era paracaidista. Entonces creo que, ciertamente, he recibido un amor como de familia, como de tíos, primos. Y no creo compartirlo con alguien más en el mundo. Es muy especial porque soy como un niñito que llega a un lugar con sus amistades, pero también soy, junto con otras personas, el wey que está detrás de la construcción de estas casas. ¿Y qué dicen tus padres de ver a su muchacho de 24 años metido en todo esto, cumpliendo los sueños de otros? Mis papás están bien, bien orgullosos, hasta llora, me abrazan, me felicitan. Pero lo más cañón es que es por ellos, es por ellos que soy como soy y, de alguna manera, siento que ellos saben que hago todo esto gracias a los valores que me han inculcado. Es que mi mamá y mi papá, desde chiquito, me han enseñado a regresar el amor recibido y a apoyar a quien no tenga posibilidades, pero nunca se imaginaron que yo iba a llegar a este nivel. De alguna manera, ellos están conscientes del porqué soy así. ¿Te sientes un héroe? ¡No! En lo absoluto, cero. Siento que soy una pieza más de un rompecabezas com puesto por miles de personas que se juntaron con buena intención y con buena fe. Creo que lo que yo pude haber hecho lo pudo haber hecho quien sea, es una cuestión de querer hacer bien y de disponer tu energía hacia un mundo mejor. Pero no creo que sea un héroe. No te pierdas: ¿Quién es la máscara? 2020 revela fecha de estreno ¿Qué es lo que más te conmovió de Pequeños Gigantes? Siento que lo más difícil es mandar a los niños a sus casas, es que creo que no tengo el derecho de decirle a un pequeño que no. Entonces debí tener mucho cuidado para no romperles el corazón. Literalmente me contrataron para llorar, pero lejos de eso ha sido una experiencia muy bonit
6k Por: Nayib Canaán
