Luego de pagar un porcentaje de la fianza impuesta por el juez el día de ayer, el actor Pablo Lyle fue trasladado a otra prisión donde se le colocaría el grillete para su prisión domiciliaria, la cual, se sabe, será en casa de su cuñado.
El intérprete salió del Centro de Corrección de Mujeres, ubicado en el centro de Miami, para dirigirse al domicilio donde pasará los próximos meses.
En dicho departamento, las autoridades están colocando una línea adicional de teléfono, misma que será el punto de referencia de su grillete electrónico.
Hasta el momento, se espera que el actor se presente nuevamente el día de mañana en los juzgados, aunque no se ha confirmado esta información por parte de sus abogados ni de las autoridades.
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“La fiscalía tiene 21 días para traer los nuevos cargos, los cuales todavía no los han revelado”, señaló la abogada Sandra Hoyos en entrevista con ‘Un nuevo Día’.