Hace unos meses, Sherlyn anunció que se encontraba esperando su primer bebé. Desde ese momento, no hay día en el que no se hable de ella y su embarazo, y aunque en algunos medios es para conocer los lindos detalles del proceso, en otros se ha insistido en “identificar” al padre del bebé, aunque ella dejó en claro desde el inicio, que se sometió a una inseminación artificial.
“Basta de que utilicen mi nombre, mi embarazo, a mi hijo, para estar llenando de notas, precisamente de relleno, los programas”, pidió la actriz.
“Ahora que estoy en los 7 meses, me ha servido la yoga, la meditación, para no pelar, pero la realidad es que si no estuviera en una etapa en la que a veces sí me siento vulnerable, claro que se siente y traigo un “chorro” de hormonas arriba, y sí creo que es un momento de hacer un llamado, ahorita que estamos en este movimiento tan fuerte en pro de las mujeres, en pro de protegernos, de cuidarnos, porque la violencia también empieza en violencia mediática”, consideró la protagonista ‘Elisa antes del fin del mundo’.
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La actriz de telenovelas como ‘Clase 406’, ‘Corazones al límite’ y ‘Amores verdaderos’, reconoció que está bien que haya gente queriendo figurar haciendo declaraciones sobre ella, pero que a ella le ha costado muchos años hacerse de un nombre en el medio: “Está padre que haya gente que quiera ser famosa, está padrísimo, pero a los que estamos acá nos ha costado, a mí por lo menos, 29 años, el que sepan mi nombre, 29 años de giras, novelas, películas, para que mi nombre vaya ligado al de alguien que nada más tuvo ganas de figurar”.
Y la duda surgió, sobre si se refería a su amigo, Lambda García, quien hace unos días hizo una desafortunada declaración, sobre que ella le había pedido en algún momento, ser el padre de su hijo. “No, a Lambda lo adoro. Hablo de todo lo que ha venido alrededor. Aveces llego a mi casa drenada, y digo ‘¡wow, han pasado muchas cosas’ y aparte de todo, está creciendo una vida dentro de mí”.
La también cantante, aseguró que aunque a veces se siente harta de estas situaciones, el llevar a su bebé en el vientre, le hace volver a la calma: “Imagínate, te voy a decir algo: en el momento en el que tienes un corazón dentro de ti latiendo, en el momento en que mi hijo se mueve en la noche, lo siento ahí, no hay nada que llorar; hay momentos en que lloro de mucha emoción, pero las publicaciones son eso, de cada martes. Les invito que vayan y compren libros, y que se metan en cosas que valen la pena”.