Un hecho insólito se hizo presente en los tribunales de Texas hace algunos días, cuando de manera completamente imprevista, un hombre señalado por haber matado a una mujer en 1998 y condenado a la inyección letal, logró esquivar la pena de muerte y seguir luchando por cambiar el veredicto de su caso.
El homicida de una anciana en Texas apeló a su pena de muerte y tuvo éxito
De acuerdo con información de AP, Rubén Gutiérrez fue aprehendido en 1998 por su supuesta participación en el asesinato de una mujer de 85 años, quien se encontraba en su residencia disfrutando de su jubilación. Sobre el móvil del ataque, trascendió que el propósito principal era robarle una cantidad que ascendía a los 600 mil dólares.
Además de Rubén, otro sujeto purga una cadena perpetua por su implicación y se tiene el registro de que hay un tercer responsable que aún no ha podido ser localizado, existiendo incluso la posibilidad de que los señalamientos por su culpabilidad expiren por el tiempo que ha transcurrido.
No es la primera vez que el preso ‘burla a la muerte’
Por increíble que parezca, este no es un caso aislado, pues ya han sido varias las ocasiones que Gutiérrez consigue interponer apelaciones y amparos a través de sus abogados, con el fin de que se revisen nuevamente las pruebas que hay en su contra. En una ocasión, se canceló la ejecución a menos de una hora de que fuera sometido a la silla eléctrica y se consideraron válidos los argumentos de su defensa para aplazar su inminente ejecución.
Todos estos intentos han sido favorables para la situación legal del acusado, pues si bien no se le ha concedido la posibilidad de un nuevo juicio, sí ha logrado al menos mantenerse con vida para seguir defendiendo su inocencia. En cuanto a qué elementos utilizan para convencer a los jurados, se sabe que se encontraron inconsistencias en las evidencias que la policía a cargo de la investigación presentaron como válidas.