A sus 43 años, Olivia Munn, una famosa estrella de Hollywood, ha tenido que enfrentarse a una de las batallas más complicadas que jamás imaginó: el tratamiento contra el cáncer de mama, enfermedad que la llevó al límite y la hizo revalorar toda su vida. Pese a la entereza con la que afrontó este diagnóstico, la actriz de cintas como “X-Men”, abrió su corazón para exponer todos los sentimientos, pensamientos y sensaciones que han llegado a ella desde que comenzó este camino.
Olivia Munn se sintió “devastada” tras someterse a una cirugía de reconstrucción mamaria
Durante una conversación en el podcast SHE MD, en el que participó la Doctora Thaïs Aliabadi y la activista Mary Alice Haney, Olivia Munn se sinceró acerca de cómo experimentó el tener que quitarse los senos a causa del cáncer de mama, para más tarde volver al quirófano con el propósito de que le pusieran unos implantes que le ayudaran a sentirse más cómoda con sí misma.
“No quería tener senos grandes. No quería que pareciera una simple operación. El cirujano fue muy claro y me dijo: ‘te verás así'. Aunque a mí lo único que me importa es que estoy viva y que sigo aquí, por mi bebé", se sinceró Olivia, quien atravesó una reconstrucción luego de que viviera una doble mastectomía, intervención que resultaba esencial ante la magnitud de su diagnóstico.
Pese a que es perfectamente consciente de que probablemente esta era la única alternativa de salvar su vida, la artista confesó que eso no impide que de vez en cuando lleguen a ella algunas ideas respecto a lo que los demás piensan de su cuerpo ahora que luce diferente.
“Dejando de lado esto, pienso que un día la gente olvidará o simplemente no lo sabrán, aunque tal vez yo nunca le diré a nadie que tuve cáncer, pero me mirarán y dirán: ‘qué mal trabajo hicieron con sus pechos’”, reveló Munn.
Por qué le fue tan complicado asimilar este cambio en su cuerpo
Además de lo complicado que de por sí es lidiar con una enfermedad como lo es el cáncer de mama, especialmente cuando adicional al estado anímico, causa también estragos físicos en el cuerpo, Olivia Munn expresó que el resultado de los implantes no fue de su agrado en primera instancia, pues estaba acostumbrada a verse de otra manera.
No obstante, se requería de una medida mayor para que abarcara correctamente su piel, por lo que tuvo que ceder a esta opción. Tras salir de la operación, la actriz de Hollywood se enteró gracias a su médico de que todo el procedimiento había sido un éxito y, si bien fue algo que la alivió, trajo consigo sensaciones agridulces.
“Estaba sola en el baño; los miré y lloré de una manera que no conocía, lloré por una semana. Me sentía devastada, no me reconocía. No sabía cómo me vestiría, pensaba en tantos estilos que ya no podría usar. Simplemente parecía como si me hubieran quitado los senos y luego los hubieran colocado de nuevo con cinta adhesiva y papel”, revivió Munn notablemente conmovida.
A la distancia, sabe que es afortunada de haber podido librar esta batalla y ha encontrado en su hija la fortaleza para adaptarse a su nueva realidad, por lo que poco a poco se ha ido despidiendo del impulso de “querer borrar sus cicatrices”.
“Tal vez algún día me sienta más cómoda con esto. No luzco igual, pero está bien, estoy aquí”, concluyó.