CONSUELO DUVAL, a quien veremos como investigadora en ¿QUIÉN ES LA MÁSCARA?, confiesa que le gustaba “esculcar” a sus maridos
TEXTO: NAYIB CANAÁN FOTOS: JAVIER ARELLANO, CORTESÍA ¿QUIÉN ES LA MÁSCARA?, JOSÉ LUIS RAMOS
Con cuaderno y pluma, Consuelo Duval se alista para ganarle a sus compañeros en el programa ¿Quién es la máscara?, que estrenará las estrellas en su barra dominical el 25 de agosto, contando en su elenco con Yuri, Carlos Rivera, Omar Chaparro y Adrián Uribe. La actriz se quita el “peluche” y se viste de espía para atinarle a los personajes que tratarán de confundir a los investigadores VIP que tiene este nuevo reality show. La artista nos revela su experiencia en la producción de Miguel Ángel Fox, quien la había llamado antes para otros proyectos, pero por cuestión de tiempo no había podido aceptar. Además, entre risas, cuenta que su capacidad para descubrir aquello que parece oculto la llevó a divorciarse tres veces. “CARLOS RIVERA TODO ME COPIA” La producción ha guardado con recelo cada detalle del programa, ¿cómo has vivido esta nueva aventura? Me siento como una niña chiquita, como que me regresaron años atrás a descubrir, a investigar, a jugar a que soy una agente especial. Es muy divertido tener que descubrir quién se encuentra detrás de esos personajes que se volverán entrañables para el público, los van a querer mucho. El lenguaje corporal es maravilloso. ¿Qué ha sido lo que más has disfrutado en las grabaciones? Jugar con mis compañeros, compartir con Adrián Uribe, hacer anotaciones, traer cuaderno y pluma, cosa que no hacía desde que dejé la escuela. Esto es como volver a ser niña, por eso estoy tan contenta con este programa, y estoy segurísima de que va a reunir a la gente en sus casas, los niños se van a sorprender, van a voltear a ver a sus papás para decirles que prendan la tele, y se emocionarán como nosotros tratando de descubrir quién es la máscara. Me divierte ver mucho a los personajes en escena, me divierten las payasadas y ocurrencias de mis compañeros. El sentido del humor de Yuri, la guapura y preciosidad de Carlos Rivera, su perspicacia, el encanto de Adrián...
¿Te pidieron cierto lineamiento a la hora de integrar el panel de investigadores? No, aquí todos estamos al natural, hasta se saldrán nuestros demonios. Todos estamos en competencia. Todos nos la jugamos para descubrir la identidad de los participantes. Carlos Rivera dice que él es el más atinado a la hora de adivinar los personajes, ¿dónde quedas tú? Mira, no debería ser él quien se ande presumiendo. Lo que digo es que es el más abusado y el más copión (risas). También se van a dar cuenta en el programa de que todo me copia, pero fuera de todo, sí creo que es quien se va a llevar más trofeos. “NO ME GUSTA QUE ME VEAN LA CARA” ¿Este es tu debut en los reality shows? Sí, creo que lo más cercano es algo que se llamaba Hazme reír; se hizo hace muchos años y no fue tan divertido como esto. Lo mejor de este programa es que no tengo que emitir juicio de nadie, entonces no me van a crucificar por no estar de acuerdo conmigo. Nosotros no tenemos que usar un botón ni calificarlos... ¿Has hecho trampa con tus mismos compañeros, los camarógrafos o los técnicos? No, no. A veces les pregunto porque me dan risa sus caras de espanto. Ahí es cuando me doy cuenta de quién sabe y quién no. En la producción sólo hay cuatro personas que saben, entonces, si trato de indagar se vuelven como locos. Pero a mí me gusta jugar sin hacer trampa. ¿Sientes que es una competencia más entre ustedes que entre los mismos participantes? ¡Claro! Es que la competencia es entre nosotros para ver quién adivina más. Y el público también podrá jugar. ¿En qué otro plano eres buena investigando? Esculcándole a los hombres. Por eso me he divorciado tres veces (risas). Es que no me gusta que me anden viendo la cara. Pero ya hoy no lo haría, eso de andar investigando ya no se me daría de aquí al resto de mi vida, aunque antes hasta la cartera revisaba. “VIVÍ TRES AÑOS COMPLICADOS” ¿Si fueras un personaje del show, sería fácil descubrirte? Creo que no porque trataría de actuar, utilizando un lenguaje corporal muy astuto para desviar la atención. Es que mis movimientos son muy notorios, pero haría otra cosa para sorprender, quizá sería un poco más sexy. Vives un gran año profesional en el que también destaca tu regreso a las series de comedia... Antes de que mi papá se fuera a vivir al cielo me dijo: “Años nones, años de dones”. Y 2019 es un año de esos, por lo que los dones me están cayendo del cielo. Le doy gracias a Dios por todo lo que me está dando; me siento lista, me siento inteligente, me siento bien, ya para recibir sin estas cosas de ego o esa soberbia que a veces uno tiene por inexperto, por joven, porque no sabes, pero la vida te va dando unos guamazos que, si no aprendes, te los vuelve a dar. ¿Recibiste muchos golpes? Sí, hubo golpes y muy fuertes. De hecho, fueron tres años complicados. Después empezó a abrirse el cielo y ya está llegando el arcoiris, las bendiciones, entre ellas ¿Quién es la máscara? [
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