Todos los protagonistas demostraron que la telenovela les dejó muchas enseñanzas.
Para celebrar el exitoso final de Amores Verdaderos, todo el elenco visitó el foro del programa Hoy. Todos contaron anécdotas sobre los mejores momentos que vivieron al grabar esta historia.
Ya en el estudio, junto a Raúl Araiza, Cynthia Urías, Galilea Montijo y Andrea Legarreta, todos, excepto Eduardo Yáñez (tuvo que tomar un vuelo), platicaron de la experiencia de actuar en la telenovela con más rating de México, 32. Previamente caminaron sobre una alfombra roja donde fueron recibidos también por sus fans.
Erika Buenfil quedó maravillada con Victoria Balvanera: “Desde las pruebas, quedarme con el papel. Estaba muy emocionada. El elenco me atrapó; tuve una buena comunicación con todos y me sentí muy querida. Era un equipo con mucho carácter pero todos entregados al proyecto.
“En un resumen fue un gran papel, lleno de matices, de vida. Fue madre, mujer, amante. Terminó siendo mamá y a disfrutarla cien por ciento”, dijo la rubia actriz que no dudó en recordar, como una de las escenas más difíciles, el momento en que hace el amor con Arriaga, desprendiéndose ante la cámara, de casi todas sus prendas.
Guillermo Capetillo recordó que una de sus escenas más complicadas fue cuando trató de golpear a Victoria.
Por su parte, Marjorie de Sousa compartió que sufría con las maldades de Macaria, mejor conocida como Kendra Ferreti: “Cada escena le pedía perdón a Dios por si esto generaba algún karma en mi vida. De verdad que Kendra se pasaba, no respetaba a nadie.
“Ese tipo de personas sufren siempre porque nunca están conformes con lo que son, mientras más daño hacen, la vida se los cobra. Si sólo sale de ti odio y veneno nunca vas a a estar feliz”, declaró.
Eiza González resaltó: “Estoy muy contenta, la magia del personaje tenía dualidad: era berrinchuda, insoportable, odiosa, pero tenía esa parte muy cómica al mismo tiempo y tierna; estaba sola”.
Ana Martin comentó que se impregnó de Candelaria porque “si los vives los transmites al público, esa es la gran pasión de ser actriz, el poder vivir la fantasía de ser otra persona. La mía fue ser Candelaria, esa mujer que amó a un solo hombre que era malo”.
Monika Sánchez afirmó: “Considero que fue un parteaguas, una responsabildad importante. Hay personajes que nos marcan y que tenemos que superar después, así que le agradezco a Nicandro, a toda la gente que fue parte. hice escenas que me desgarraron el alma y lo sigo llorando.
Todos los actores coincidieron en que les urgen vacaciones, pues estuvieron casi un año encerrados en los foros de grabaciones y viajando a las locaciones de la Hacienda Balvanera.
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