Entre más detalles surgen y se esclarece a profundidad el dantesco crimen en el que el cocinero Daniel Sancho, hijo del actor español Rodolfo Sancho, asesinó al cirujano plástico colombiano Edwin Arrieta, el asombro entre la opinión pública aumenta.
Sin la intervención de terceras personas y premeditado, Daniel perpetró el homicidio el pasado 2 de agosto, en la isla de Koh Panghan, Hakparm, donde él y Edwin pasarían días de vacaciones. Tras la confesión del asesino, la policía local comenzó una investigación y reconstrucción del caso que está a punto de finalizar con el esclarecimiento de la causa de la muerte.
El subdirector de la policía tailandesa, Surachate Hakparn, detalló en conferencia de prensa cómo fue el paso a paso del crimen y reveló la autopsia practicada al cadáver de la víctima.
“Primero se pelearon, según las pruebas en el lugar (escena del crimen), Daniel le dio un puñetazo y luego Arrieta se cayó y se golpeó la cabeza contra el lavabo, pero no murió en ese momento, sino cuando Sancho comenzó a cortarle el cuello, según los forenses”, reveló.
Los investigadores también llegaron a la conclusión que Daniel apuñaló a Edwin antes de descuartizarlo para luego deshacerse de los restos; la policía ya halló 8 de las 17 partes del cuerpo, el torso aún no ha sido encontrado.
El móvil del homicidio sigue siendo pasional, según los investigadores científicos. La pareja mantenía una relación desde hacía un año cuando se conocieron a través de Instagram. Al parecer, Sancho quería alejarse del doctor, pero este no y por eso se detonó la pelea.
Daniel Sancho se mantiene en prisión provisional en la cárcel de Koh Samui, al sur de Tailandia, mientras su proceso judicial concluye y se decide si recibe pena de muerte o cadena perpetua.