Para nadie es un secreto que Luis Miguel posee un carisma único, capaz de cautivar a cualquiera que consuma sus creaciones, incluso sin saberlo. Así como le pasó a un internauta, quien relató que asistió a un concierto del cantante sin tener una idea clara de quién era, lo que para su sorpresa, no le impidió gozar al máximo del espectáculo y volverse fiel admirador de “El Sol”.
Un concierto y un repertorio exquisito le bastaron a un hombre para convertirse en máximo fan de Luis Miguel
En redes sociales se viralizó un clip protagonizado por un usuario identificado como Bill Panoff, quien le relató a sus más de 30 mil seguidores la peculiar noche que había vivido gracias a su esposa. Esto después de que lo invitara a una salida sin decirle exactamente qué plan tenía, algo que le generó grandes expectativas, aunque en definitiva, nunca lo hizo imaginar qué tipo de experiencia aguardaba por él.
Hasta que llegó a su destino, el sujeto se percató finalmente de que irían a un recital, por lo que ahora su curiosidad estaba centrada en quién sería el artista que protagonizaría el show.
Al ingresar al recinto, Panoff le preguntó a uno de los empleados si sabía qué cantante se presentaría esa noche y fue ahí cuando supo que era Luis Miguel, un nombre que le sorprendió puesto que no sabía mucho de él, a lo que el trabajador le contestó que él tampoco.
El buen sabor de boca que se llevó
Esto no le impidió que entrara con la mejor de las actitudes y desde antes de que iniciara, ya se mostraba entusiasmado respecto a la calidad del espectáculo que estaba a punto de presenciar. Conforme avanzó la velada, las reacciones de satisfacción de Bill se hicieron cada vez más notorias, hasta que llegó al punto de que ya no pudo disimular y se confesó fanático, cambiando abruptamente su percepción en menos de dos horas.
Los comentarios rápidamente se inundaron de felicitaciones hacia el hombre por su “buen gusto” y le aseguraron que no se arrepentiría de haberse sumergido en el mundo de “Luis Mi”, pues es un cantante cuya trayectoria vale la pena seguir.